domingo, 2 de noviembre de 2008

LOS ALEGRES CHICOS DEL CORDÓN SANITARIO

 

La expresión del “cordón sanitario” (una gilipollez como otra cualquiera) se puso de moda con el Pacto del Tinel de hace unos años, para aislar al PP en la política catalana. Ya  estaba aislado desde hacía mucho tiempo pero los camaradas de la izquierdona más rancia del país querían demostrar que ellos no tienen complejos en usar el bisturí y la mascarilla contra todo lo que consideran que va en contra de sus intereses.

La última semana el diario ABC ha publicado que Ernest Benach, el presidente del Parlamento catalán, ha tuneado su A-8 oficial (110.000 euros del ala para que vaya a gustito de casa al trabajo y viceversa) con unos  “extras” –incluido un reposapiés- que han costado una miseria: veinte mil eurillos. Como en este país hay gente que se escandaliza por todo, el bueno de don Ernesto -al que siempre vemos en el palco del Camp Nou y del Espanyol ejerciendo de President- ha tenido que llevar de nuevo el Audi al taller para que le quiten los añadidos. Ya no podrá ver la tele en el puto coche ni escuchar el MP3 a todo gas ni escribir los discursitos institucionales en la mesita escritorio, camino del Parque de la Ciudadela. Menos mal que no se le ha ocurrido a nadie el pedirle que vaya en Metro al trabajo, o en su propio coche, como hace todo quisque e hijo de vecino. Menos mal que todavía hay clases, unas con más dignidad que otras. La clase política, por ejemplo…

Poco después el mismo endemoniado periódico (que encima es monárquico) denunciaba que el vicepresidente Josep Lluís Carod Rovira –Pepe Luí para los amigos-, del mismo partido “republicano” que don Benach, oh casualidades de la vida, se beneficia cada año de unos míseros 21.000 eurillos en dietas y gastuchos de desplazamiento. Eso sin contar con lo del coche oficial (adivina, adivinanza: ¿será otro Audi-8 o un Fiat Punto?) y lo del chofer correspondiente, que eso de que un mandatario conduzca su propio coche no se ha visto  ni en el Congo ni en la Conchinchina. 

Algún día habrá que escribir un poquillo sobre el matrimonio civil de nuestros políticos (de todas las castas y gobiernos) con los coches oficiales Audi, pero mientras llega ese divertido momento, es preciso saber qué reacción han tenido los aludidos camaradas. Por de pronto, se han cabreado –y con razón-  porque algunos periodistas les acusan de manirrotos mientras que el pueblo soberano que tanto les adora e idolatra las está pasando canutísimas por la maldita crisis.  ¿Por qué no van a poder darse el gustazo de ir desde el pueblo a Barcelona y viceversa con los piececitos bien recogidos en el anchuroso Audi o con las dietas bien amarraditas en la cartera? Pero, ¿no los votan para que hagan eso? ¿Pero es posible que haya todavía alguna gente envidiosa y puritana que vea escándalo en esas bagatelas?  No lo entienden, y por eso se han cabreado. Y claro, se han sacado de la manga otro nuevo cordón sanitario.

Para ello han recurrido a su primo de Zumosol, el presidente de ERC, don Juanito Puigcercòs, colega mío en el nombre de pila y en salir en defensa de los pobres, desvalidos y muertos de hambre. Como era previsible ha sacado ese talante sectario, troglodítico y rebuznero de las grandes ocasiones, envolviéndose/escondiéndose tras la bandera y la patria, para pedir un cordón sanitario para el ABC. Si ahora, que todavía es casi un don nadie, saca a pasear estas democráticas maneras e intenciones, no quiero pensar qué sacará de la chistera el día en que su partidín tenga una mayoría absoluta en Cataluña. Se empieza aplicando el “cordón sanitario” al enfermo y se le acaba mandando a la “cámara de gas”.

¿Quién dijo que la Inquisición ha muerto?      


== VIDEOTECA ==

LOS FABULOSOS CADILLACS - LA PARTE DE ADELANTE
Donde se ponga un Cadillac... La letra viene de perilla...



KNIGHT RIDER - WHAT I'VE DONE
El coche fantástico ha tenido sus hijitos, aunque siempre preferiremos el original.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Un escritorio en el coche? Yo si consulto un mapa (de copiloto, ¿eh?) ya me mareo, como para encima andar escribiendo con el coche en marcha. Con lo bien que se va echando una cabezadita por esas Diagonales de dios.

Por cierto, hablando de cabezaditas me he recordado de las míticas que se echaba el Fraga: microsueños creo que le llamaban eufemísticamente seguro que para tapar que se queda dormido a las primeras de cambio.

Y ya que estamos hablando de Galicia, al que también se le ha ido mogollón la olla con los fastos para mejorar el confort laboral ha sido al colega (en el sentido estricto) del Benach, el Touriño.

A su lado, lo de los extras del Audi es pura calderilla.

Juan Puñetas dijo...

Tengo la impresión, no contrastada empíricamente porque no se dejan, que tenemos en España la clase política que mejor tira con pólvora de Rey (aclaración para los chicos de la LOGSE: "dilapidar el dinero ajeno"). Sonn legión y de todos los colores. Hasta los que ya no están, como el Ibarra extremeño, que se ha agenciado un despachito con secretaria y todo lo que haga menester (si fuera más joven, yo diría que hasta con polvete diario). Total: 300.000 eurillos de nada. El día que se rompa la burbuja autonómica la crisis de ahora va a resultar de juguete. Toma nota de la fecha en que escribo ese concepto que quizás pronto desarrollaré un poco: 07/11/2008. Más que nada porque cuando llegue todos los listos de turno dirán -como ahora- que no se la esperaban. Cualquiera que tenga dos dedos de frente y no esté en el corralito chupando del bote sabe de qué hablo.