viernes, 27 de octubre de 2006

JULIO CAMBA, EL HUMORISTA SOLITARIO


Acabo de leer “Haciendo la República”, del periodista y humorista Julio Camba, una completa colección de artículos publicados en el diario ABC durante 1934 y 1935. Un ingenioso tipo cuya memoria nadie se había preocupado en recordarnos pues fue un solitario que se reía sanamente de su tiempo, de los personajillos que mandaban, de las costumbres y hasta de su propia sombra. Gente lúcida y desamparada de cualquier causa política al que los sectarios de uno y otro signo han mantenido en la oscuridad hasta la edición de este libro. Lo que había leído de Camba siempre me pareció interesante, entre otras cosas, porque siempre he sido devoto del humor inteligente. Aquí van algunos pequeños fragmentos casi escogidos al azar en el libro de referencia y que ponen de manifiesto en ciertos casos cómo han pasado 70 años y parece que no ha pasado el tiempo.


*** “Lo que ocurre es que en España hay, desde hace tiempo inmemorial, dos grandes bandos que se tiran a degüello, y, cuando en el mundo surgen dos naciones o dos grupos de naciones que quieren tirarse al degüello, entonces cada bando se va con la nación o el grupo más afín, no tanto por deseo de exterminar al otro grupo o a la otra nación, como por afán de degollar al otro bando. Así al etiopista español se le importa generalmente un bledo la independencia abisinia, pero como esta independencia se encuentra amenazada por Italia, que es un país fascista, él, hombre de izquierdas, se proclama etiopista. En cuanto al italianista, no es que sienta una predilección especial por la pizza o el queso de Parma, pero si las izquierdas se van con Etiopía, su deber está bien claro: ayudar a los italianos a zurrar a los etíopes. Todos los conflictos bélicos que estallan en el mundo no nos interesan nunca, a los españoles, más que en cuanto pueden suponer una variación táctica de nuestra antigua e interminable guerra civil. Unas veces hacemos de rusos y japoneses, otras de aliadófilos y germanófilos, y ahora, aunque no pase nada en Abisinia, ahora vamos a hacer de etíopes e italianos”.


*** “No diré yo que el hombre actual, a quien se deben tantas maravillas, sea más bruto que el de las cavernas; pero como su conducta moral tampoco permite afirmar que lo sea menos, habrá que registrar el hecho, nada tranquilizador ciertamente, de que es un bruto muchísimo más científico, es decir, un bruto con una técnica sutil y formidable al servicio de su brutalidad”.


*** “En esta época en que hay tantos hombres que de la noche a la mañana se sienten republicanos de toda la vida, yo declaro que no he sido republicano nunca. El malestar de España tenía, en mi sentir, causas demasiado profundas para que pudiera curarse con algo tan superficial como un cambio de régimen, y mucho menos con un cambio del nombre del régimen”.


*** “Los votos se negociaban entonces con el Congreso por un procedimiento semejante al que se usa en Vigo para negociar la merluza y el besugo. Un señor se presentaba allí con tantas o cuantas cestas de votos y los compradores iban poniendo precio:


-¿Qué quiere usted por el lote, vamos a ver? ¿La libertad de cultos?

-¡Hombre! La libertad de cultos es muy poca cosa. Déme usted el sufragio femenino y cerramos trato.

-No, no. El sufragio femenino no me conviene porque las mujeres nos tienen mucha hincha. Le daré a usted la secularización de los cementerios. ¿Hace?”


*** ”Los ingleses no tienen Constitución, ni la necesitan, porque tienen, en cambio, lo que un notable tratadista llama “sentido constitucional”. Por nuestra parte, nosotros tenemos una Constitución; pero como carecemos de sentido constitucional, es, poco más o menos, igual que si no la tuviésemos”.


*** “En España sigue considerándose al Estado como una entidad cuya misión consiste en subvenir a todas las necesidades de los ciudadanos, a fin de que éstos puedan cultivar su individualismo sin tener nunca que entenderse con nadie en una relación de mayor o menor dependencia”.


*** “Hay personas que no saldrían nunca de viaje si pudieran suponer que el mundo les reservaba la menor sorpresa, y mi amigo es una de ellas. Para él la delicia de viajar consiste en hacer por los rincones del planeta la misma vida que hace habitualmente en la Gran Vía o en la calle de Alcalá”.

1 comentarios:

Jc dijo...

Plena actualidad en muchos de sus comentarios. Sobre todo en el de los brutos.

Buena prueba de ello la tenemos en Irak, Afganistán, Guantánamo ...

Con respecto al comentario sobre los votos, me temo que incluso hemos ido a peor. Al menos en esa época, según leo, negociaban. Ahora se exige y, además, si no estás de acuerdo eres tildado de fascista.