domingo, 31 de mayo de 2009

PARA ASESINOS, LOS DE ANTES

 

Que el mundo y sus gentes vienen degradándose desde tiempos ha es una verdad como un campo de fútbol. Una de las cosas que ha empeorado a ojos vista es la delincuencia y la matanza de gente inocente.

Los medios de destrucción masiva proliferan tanto en estos tiempos que hoy día no hace falta ni un gramo de inteligencia para llevarse al otro barrio al personal o para destrozar cualquier lugar paradisíaco. Inconvenientes de la técnica moderna y de la necedad que habita en el cerebrín de muchos humanoides del siglo en vigor.

Antiguamente un tonto del culo sólo disponía de una tiza o un trozo de roja pizarra para escribir en las legendarias paredes de una catedral la manida frase de “Tonto el que lo lea”. El primer tonto era él mismo, claro. Hoy día, cualquier desgraciado imberbe compra un spray en un kiosco y no deja espacio libre en todas las paredes de la misma catedral, pintarrajeándolas con miles de signos ininteligibles ya que de su mente plana no puede salir otra cosa. No veas los miles de euros que cuesta dejar esas sacras y antiquísimas paredes nuevamente como el jaspe. Todo gracias a un imbécil con menos fósforo en el cerebro que el existente en cien cajas de cerillas.

De igual modo, subiendo en el escalafón de las gamberradas y los delitos, podemos llegar al hacker financiero actual capaz de chuparse la pasta de miles de personas, entrando como Pedro por su casa en sus cuentas corrientes y sin más alardes de sabiduría que tener algunos conocimientos o trucos informáticos y estar en el lugar apropiado. Antiguamente anda que no tenía que discurrir el pícaro correspondiente para estafar unas cuantas monedas al palurdo inocentón… Se necesitaba amplia inteligencia, conocimientos psicológicos del patán, un piquito de oro y buenas piernas. Así se daba el timo del tocomocho o similares. Hoy, ese bancario o informático de pacotilla –con menos ingenio que las teclas que pulsa- en unos minutos y con algo de suerte se monta el negocio del desvío de la pasta, todo sin riesgo ni finura, por lo que en cuatro días acaban pillándole gracias a los rastros dejados en la jugada.

Pero lo peor es cuando la jugarreta implica acabar con la vida de alguien. Antes los terroristas y asesinos seleccionaban a la víctima, estudiaban sus pasos, conocían su psicología y comportamientos y tras un master en la universidad del ingenio y de la valentía personal (jugándose su propia vida, a la que valoraban bastante) acometían su obra con la mayor precisión y destreza. Atacaban al jefe, al responsable, a quien tenían que liquidarse para fastidiar realmente el invento. Atentados famosos de la historia así lo atestiguan. En la actualidad ya no hay gente tan estudiosa en tan trágicos asuntos. Los nuevos palanganeros del terror no se calientan mucho los cascos: se pone la bomba, se aplica el detonador a distancia, boom y ya está. Y si hay que morir en la masacre, se recluta a varios descerebrados de esos que valoran su vida menos que la de un mosquito, y santas pascuas o bombas. Que mueren gentes que no tienen nada que ver con el asunto: daños colaterales. Que se destrozan edificios enteros, no importa mientras despachurremos a un grupo de paseantes. La degradación de este terror moderno es matar a gente que no tiene culpa de nada. Muere el que en ese momento estaba sacando dinero del cajero automático. Fenece la empleada de la limpieza que barría la acera. Se evapora el paseante con perro que miraba el escaparate de una tienda situada en el lugar más inapropiado.A esta chapuza, a esta acción “heroica” le llaman sus ejecutores “atacar los intereses norteamericanos, británicos, españoles o lo que sea”. ¡Serán subnormales!

Para delincuentes, asesinos y terroristas, los de antes. Aquí sí que vale que cualquier tiempo pasado fue mejor. Gente que sabía hacer perfectamente su oficio, no como los chapuceros de ahora. Ya ni en los delincuentes queda un gramo de inteligencia y profesionalidad, incluyendo a los que se mueven por las altas instancias del politiqueo. ¿A dónde vamos a llegar?

miércoles, 27 de mayo de 2009

¡QUÉ BUENO ES ECHAR LA VISTA ATRÁS!

Lo bueno de echar la vista atrás es que a muchos y muchas, especialmente gente del famoseo  y el politiqueo, se les pilla en calzoncillos y en bragas. Resulta chocante que los medios de intoxicación y desinformación de masas no tengan una sección o programa titulado “Hemeroteca” o “Videoteca” donde repasar algunas de las cosas que se dijeron e hicieron hace años por parte de quienes hoy pretenden hacernos ver que han nacido ayer, limpios de polvo y paja. A falta de pan, buena es la torta que me he agenciado de mi primera bitácora internetera, allá por el 18 de noviembre de 2003, y que hoy  terminaré repasando. Allí, una semidesconocida Carme Chacón, actualmente ministra de Defensa, asomaba la patita en forma de entrevista en un diario y algunas de sus manifestaciones me dejaron  anonadado. Ya entonces la doña me causó una profunda impresión.  Hoy recupero el articulillo que le dediqué (“¡esta chica es una joya!- decía en él). El Puñetas, allá por 2003, adivinó lo que esta mujer escondía tras su carita de niña buena pero insípida. Ahora estamos recogiendo los frutos.

HA NACIDO UNA ESTRELLA.

“Me encanta Carme Chacón, la nueva estrella de la galaxia pesoera. Desde que la vi por primera vez en la tele hablando desde la Secretaría de Educación del PSOE quedé extasiado por su piquito de oro y sus reflexiones de hojalata. La creía una advenediza fruto de los enchufes y el oportunismo ideológico pero resulta que la moza tiene las maletas bien hechas. A sus 32 años ya ha recorrido medio mundo, siempre con beca (Manchester, Friburgo, Ottawa...) y hasta ha hecho sus pinitos conciliadores como observadora de esos organismos internacionales inútiles que nada solucionan: estuvo en Bosnia y Albania representando a la OSCE. También ha tenido tiempo de ejercer el poder municipal en su pueblo y de aprenderse de carrerilla una serie de tópicos la mar de útiles en el mundo de la política. Así que me quito el sombrero y la peluca si hace falta para dar la bienvenida a esta nueva lumbrera del cotarro político-funcionarial y alucino, vecino, con algunas cosas de las que dice de sí misma la nueva Carmen I de España y V de Cataluña:

“Mi compromiso se inició siendo muy pequeña, en mi casa, y marcado por un objetivo: que ninguna generación tenga que vivir lo que vivió mi abuelo, que siempre decía que la Historia de este país le había robado la juventud”. Carme ya de pequeñita no jugaba con las muñecas y esas cosas inútiles y reaccionarias. Escuchaba encandilada al abuelo escuchando historias de la guerra civil y lo ladrona que es la Historia. Así que lo tuvo claro desde el principio y en cuerpo, alma y pasta se está dedicando a lograr que ningún joven las pase canutas.

"Yo en mi casa he vivido el orgullo de la multiplicidad de identidades”. Me encanta el lirismo de la Carme. Sus padres, funcionarios ambos, son de Cataluña y de Almería. Una “multiplicidad de identidades” muy interesante y llamativa. Por eso la anécdota adquiere ya categoría, lírica por supuesto, cuando afirma: “llevo dentro el mestizaje norte/sur”. Y ahora, unos minutos de pausa que debo ir al lavabo pues de tanto reír me estoy meando que no veas…

....................

Ya de vuelta, prosigamos con sus cuitas. “A mí me han educado como una superviviente”. “Uno de mis referentes es la frase de Manuela de Madre: las mujeres somos como los caracoles, siempre con la culpa cargada a la espalda”. Cuando afirma que tener hijos es algo que quiere hacer un día, la periodista le dice que “cuidado, que no se le pasen las ganas”, a lo que doña Carmen responde. “Ayudan tan poco las administraciones públicas…”. Y es que tener un hijo ya no es sólo cosa de dos, también de las subvenciones de Aznar y Maragall.

Al final voy a acabar enamorándome de Carme, porque ya es que lo borda cuando afirma que le gusta mucho escribir: “Lo necesito para vivir en paz, por salud sentimental. Llego a casa y me reconcilio conmigo misma a base de confesiones íntimas. Sin querer me despierto, a la una de la mañana o a las tres, y escribo. Escribo poesía y prosa poética del desamor. Soy devota de Pedro Salinas.” ¡Esta chica es una joya! Sin pulir, pero una joya. Y ahora, perdón pero necesito un pañuelo porque no puedo contener la emoción. Hacía años que no leía una entrevista tan sensacional como ésta. ¿Me estaré volviendo idiota?”. 

Espero haber alumbrado un poquito más el caretillo del personaje, ahora metida en cosas de tanques y zambombas, y sonando como “sucesora” de don Zapatero, rey de las Españas y parte del extranjero.

domingo, 24 de mayo de 2009

MIRÁNDOME EL OMBLIGO

El día 8 de marzo de 2002, Juan Puñetas se lió el teclado a la cabeza y –al hilo de la actualidad- empezó a publicar algunas de sus ocurrencias en la interné, por si a algún alma caritativa le daba por leer alguna. Hoy no se me ha ocurrido otra ocurrencia que volver la vista atrás y escoger a voleo algunos polvos (frasecillas y titulares) que mi cerebrín inventó en aquel primer año de vidilla bitacoril y que ahora han derivado en estos lodos paridescos. ¡Qué tiempos aquellos de la prehistoria internetera!
ALGUNAS FRASECILLAS

• Me maravilla la facilidad que tienen los sabios de este planeta de la estupidez en cuantificar todo fenómeno.
• Cualquier pelotero analfabeto tiene a su alrededor más micrófonos que el investigador o intelectual más sabio del país.
• Algunos de los más peligrosos psicópatas trabajan en el cine como guionistas o directores.
• Cuando los políticos se insultan los unos a los otros, en realidad es a los ciudadanos a quienes están insultando y despreciando.
• Cómo no van a escasear las revistas de humor en este país si sólo con las paridas de muchos de los jueces que nos protegen y dictan “su” justicia tenemos diversión garantizada ¡y gratis!
• Todos los coches deberían traer una pegatina imborrable en el capó que dijese con letras bien gordas eso de: “Este bicho es peligroso para la salud”.
• “A la hora de hacer política, la realidad me estorba”. Ninguno lo dice, pero todos los piensan.
• Muchos políticos se han inventado el pasado, se están inventando el presente y en épocas electorales se inventan el futuro.
• Se empieza poniendo límites al campo y se acaba reduciéndolo a una maceta.
• ¡Cuánto imbécil corre tras la baba de un gobernante, un famosillo o un cantamañanas!
• Los que necesitan psicólogos son los propios psicólogos.
• A mí lo que me gusta es pertenecer a un país bien grande, porque cuanto másextenso es, más lejos están los que nos mandan y controlan.
• Nuestro futuro será regresar al hombre de Cromagnon pero sentado delante de un ordenador y conduciendo un trasto.
• ¿Está prohibido opinar sobre las religiones, salvo para decirles amén?
• Comprendo ahora porqué se llaman “fallos” las sentencias dictadas por los jueces. El lenguaje no miente.
• En estos tiempos en que cualquier cagada es considerada “arte” hay que tener bien implantada la idea de que lo artístico es algo excepcional.
• Tarde o temprano los desarrapados que esperan tras las alambradas nos merendarán y no dejarán de nosotros ni los huesos.
• Cualquier tonto del haba que salga encerrado en la caja idiota (TV) durante unos cuantos programas, alcanza notoriedad, fama y riqueza.
ALGUNOS TITULARES:

• ¿Saben escribir y leer los legisladores y jueces?
• Beneficios bancarios: el robo perfecto
• Cine y psicopatología
• La política, nueva especialidad psiquiátrica.
• El hombre, un accidente de la naturaleza
• A la bim, bomba.
• Derecho a la vida….pero en el más allá.
• Hunta d'ehkritoreh: ortografía, no problem.
• Qué cara es la higiene.
• El rey mago Zapatero
• Sobran chimeneas andantes.
• El water televisivo.
• El coñeo del cambio de hora.
• Hay quienes piensan con el pito.

miércoles, 20 de mayo de 2009

SIN PUDOR, VERGÜENZA NI BICARBONATO

El domingo pasado fallecía el escritor uruguayo Mario Benedetti. El lunes al mediodía los telediarios de las telecacas españolas debían recoger la noticia –se supone-. Ese día me pilló casualmente (nunca suelo verlas)  con la pantalla de Antena 3 delante de mis narices. Sin remedio, tuve que tragarme su noticiario. Ya bien avanzado dedicaron en esa santa casa unos 15 segundos a “informar” sobre la muerte del famoso poeta y escritor. Pareciera que no tenían ni idea de quién era semejante señor. Acto seguido ya no recuerdo de qué hablaron, sólo sé que fue alguna gilipollez habitual según me contó un asiduo del bar y del telediario de esa cadena. (Tampoco parece que los de las otras mayoritarias sean para tirar cohetes). Recuerdo que en esos momentos el huevo frito con patatas que me estaba echando al coleto casi se me atraganta. No de la indignación, que ya no me queda visto lo que lleva uno viendo desde que nació hace más de 50 primaveras, pero sí de vergüenza propia al comprobar cómo en este país todo lo que huele a cultura seria, profunda, elaborada y comprometida es ninguneado por los medios masivos de incomunicación e intoxicación social. Ahí tenía un ejemplillo más para la colección. Y encima provenía de una cadena (del WC, se entiende) cuyo accionista principal es el Grupo Planeta, cuya fortuna de ayer y ahora proviene básicamente de fabricar y vender libros, aunque presiento que lo mismo podrían ser churros,  piruletas o chorizos.

Luego, unos minutos más tarde, los marisabidillos locutorcejos de deportes (es un decir, sólo hablaron de fútbol) se tiraron casi diez minutos diciendo estupideces y cosas manidas  sobre algo tan ya sabido como la consecución de la Liga por el Barcelona, noticia que había acaecido hacía ya dos días. Como la televisión del bar era de plasma y a todo color, pude comprobar que el sonrojo no asomó en ningún momento al careto de aquellos locutorcillos, así como tampoco a quien había comentado en un pispás la muerte de Benedetti. Y es que el bien que hacen a la humanidad los Messi y compañía no tiene ni punto de comparación con la larguísima trayectoria de don Mario, siempre escribiendo cosas raras y profundas que no entiende ni Chiquito de la Calzada . ¡Viva el opio del populacho! (Ni qué decir tiene que no pienso volver más a ese bar, ni a ningún otro donde a la hora de comer tengan enchufada Antena Puaff, Telepingo o cualquier otra telemierda habitual,  provocando indigestiones a los comensales).

¡Si al menos regalasen un poco de bicarbonato!  Pues ni eso…

domingo, 17 de mayo de 2009

FINLANDIA, ¡QUÉ LEJOS QUE ESTÁS..!

Si hay un consenso en este país (o sea, uno de cada veinte ciudadanos) es que la educación está hecha unos zorros. La que entendemos por “urbanidad” y la otra, la institucional. Los colegios, centros de Secundaria y Universidad son auténticos invernaderos de melones y calabazas. No es que la especie (que también) esté degenerando en un retroceso camino del hombre de Crogmanon; es que –como dijo el clásico- lo social envuelve y contamina todo y hoy día tenemos una sociedad que está más quemada que el palo de un churrero. Un sabio como el setentón Paul Ehrlich lo ha dicho muy claro: “Hemos alterado los ecosistemas y la atmósfera tanto que la Tierra ya es casi inhabitable”. El zoquete del Juan Puñetas también ha dejado escrito –casi con las mismas palabrejas- que “el ecosistema social y la atmósfera humanoide actuales tienen menos porvenir que un langostino en Navidad”. O sea, que lo llevamos claro. Así que no extrañará que la educación –esa cosa evanescente que se intenta inculcar en las generaciones actuales para que puedan vivir decentemente en un futuro- camine arrastrándose por el fango, que diría el tango.

Sin embargo, todavía hay esperanza. Hay un país europeo –Finlandia- del que hablan y no acaban los profesores y entendidos en la cosa educativa. Allí parece que se preocupan algo más de la educación y así les va de bien. Así que he pedido a Rigoberto Criadillas, Catedrático de Currículos Verbeneros (1), que me cuente –acaba de regresar del país nórdico- las cosas más sustanciales de aquel sistema educativo. Pongámonos serios y veamos unas cuantas:
“Resulta fácil la movilidad social. Esta permeabilidad entre clases sociales se debe a la educación. La diferencia  entre los resultados de los alumnos más capaces y los menos es muy pequeña, pese a que los resultados de Finlandia son los más altos de Europa. Predominio de la enseñanza pública. Alta valoración social del profesorado (similar a la de los médicos y abogados), con un exigente periodo de formación teórica y práctica. Los profesores no están saturados de tareas burocráticas y administrativas. Alumnado responsable. Escolaridad obligatoria desde los 7 años. La escuela es un lugar de trabajo. Los trabajadores finlandeses suelen ser duros y honrados (ética protestante). Cinco millones y medio de habitantes. Sistema educativo pequeño y fácil de manejar. Gran autonomía a los municipios en la gestión de la educación. Primer país con menor corrupción. Primer país en el ranking de los más democráticos. País de economía muy dinámica y competitiva. La educación es una preocupación social y no sólo del gobierno. Profesores de aula que imparten todas las materias de primero a sexto. Profesores especialistas de aula con formación universitaria y preparación altamente pedagógica. Importante peso de la investigación educativa. La mayoría de los docentes son contratados por los municipios. Las vacantes se anuncian en los periódicos y revistas profesionales. A los profesores noveles no se les encargan los cometidos más difíciles: suelen tener un mentor durante el primer año. No son elegidos para un “puesto” fijo e inamovible, sino como expertos dentro de un equipo de trabajo. No hay un servicio de inspección externo. Tres leyes importantes: a) ley de financiación, que fija la contribución del Estado  en la educación de cada alumno; b) ley de las condiciones económicas y laborales del personal, fijadas cada año por común acuerdo entre los ayuntamientos y los sindicatos; c) ley que fija el currículo y que es idéntica para todos los alumnos finlandeses: el mínimo número de horas, los objetivos a conseguir y los contenidos que trabajar. Los directores dirigen los centros y los profesores se dedican a enseñar. Los espacios de las aulas (y su arquitectura) suelen ser variados y ricos en estímulos. Las destrezas manuales tienen una gran importancia. El centro del aula es una mesa central con ruedas y un ordenador conectado a un cañón. El ordenador dispone de internet y reproductores. También hay en cada aula un proyector de cuerpos opacos. No hay mucha lección magistral. Hay silencio y respeto en las aulas. Todo el mundo se pone cómodo para trabajar: bata, en calcetines o zapatillas… Los ayudantes del profesorado hacen sustituciones cuando el profesor tiene que ausentarse. Los alumnos se mueven dentro del aula con libertad y salen de la misma sin solicitar permiso. Los pupitres pueden moverse según el tipo de actividad.  El alumnado inmigrante es relativamente pequeño. El comedor lo comparten alumnado y profesorado. Una enfermera va un día a la semana y un médico dos veces al mes. La administración municipal está cerca de los directores/as y los considera interlocutores valiosos. Hay una política de continuidad por lo que el sistema educativo no cambia con cada cambio de gobierno”. (2)

Transcrito todo lo cual, piénselo si ya está corriendo en busca de un billete de ida y no vuelta a Finlandia. Su tasa de delitos de violencia de género es de las más altas de Europa y sus niveles de agresividad y violencia social (incluyendo los suicidios) es bastante infumable. Con lo cual queda demostrado que, como señalan Ehrlich y el Puñetas, “del desastre aquí no se salva ni el que asó la manteca”.

(1)    Ejemplos. “¡Pasen y vean el circo!" "El chocolate: un proyecto de investigación muy dulce"· (Revista de Cuadernos de Pedagogía, enero 2009).
(2)    Criadillas es un tramposo. Cuando la revista citada en el párrafo anterior cayó en mis manos me di cuenta que el tío ni siquiera sabía dónde está Finlandia en el mapa. Simplemente se dedicó a copiar algunas de las frases aparecidas en ella entre las páginas 53 y 82. ¡Valiente pirata!

miércoles, 13 de mayo de 2009

CUENTO PARA ENTRETENER (2 DE 2)

 
-¿Ha tenido buen sueño el señor?
-He dormido estupendamente, Sancho. No hay nada como hacer las cosas bien hechas y saber que la felicidad de millones de hipotéticos votantes depende de las sabias decisiones de uno…
-Mire vuesa merced que el patio está revuelto y que conviene ser un poco autocríticos. Que yo voy al mercado, entro en las tabernas y paseo por el extrarradio y no vea lo que se cuenta de usted. Que si sólo veía molinos de viento cuando en realidad era una crisis de caballo; que su  bálsamo de fierabrás está muy bien para un rato pero lo mejor sería no tener que usarlo por culpa de las palizas que da el paro…
-Es que, además de ignorantes, son unos desagradecidos. Pero así es la vida, amigo Sancho, una ingratitud detrás de otra. Mira tú a los vecinos de palacio que ahora, cuando llega el momento de apretarse un poquitín el cinturón, me dejan solo, como si fuera un apestado. ¡A mí, que tantos favores y dádivas les he dado en los últimos cuatro años! Pero yo a lo mío, que la historia pondrá a cada cual en su sitio.
-Señor, deje de lamentarse que ese no es su estilo y cuénteme que nuevas ideas se le han ocurrido hoy.
-Pues verás, Sancho. He pensado dar unos maravedíes a todos aquellos vecinos que decidan comprar una carreta nueva. Y a los que, pese a eso,  no puedan costeársela les voy a hacer participar en un sorteo de cien carretillas.
-Pero lo suyo parece una tómbola, señor. Si no toca un pito, toca una pelota…
-Ah, ¿tú también con el mismo cuento que maese Durán i Lérida? ¿No te habrás vendido al enemigo y actúas de espía ante mis propias napias?
-¡Me ofenden sus dudas sobre mi lealtad casi perruna, señor! Cierto que todavía estoy esperando que me nombre Emir de la Alianza de las Civilizaciones, como me prometió, pero seré su fiel servidor hasta que nos echen del palacio… 
-Muy agradecido, Sancho. Perdona ese lapsus de sinceridad (bueno, quiero decir, de duda ante tu servicio fiel). Como te decía, además de lo de ayudar a mis convecinos a la compra de una nueva carreta para ver si así se anima el patio, he pensado que ya que la publicidad de la TVE la van a pagar los de la interné esa, qué menos que compensemos a muchos de ellos –los que acuden a desasnarse a las escuelas e institutos- con un buen ordenador portátil, que ahora hay unas gangas muy gangosas…
-No es mala idea, señor. Pero debería de pensar un poquito más en la vidilla de la vida, ya sabe, algo para mejorar el sexo de los angelitos… porque ¡menudo porvenir les espera viendo el que actualmente tienen muchos de sus padres!
-Precisamente en eso había pensado anoche cuando interrumpimos nuestra charla de palacete. Ya bastantes problemas tienen los padres con lo suyo para que encima se tengan que preocupar de los problemillas de sus hijos. Así que he pensado que, aprovechando la nueva ley del aborto para el pueblo,  las adolescentes de 16 años podrían hacerlo –si lo precisan- sin necesidad de que sus padres y madres se enteren, no necesitando su permiso para tan importante decisión. Quiero, además, que des órdenes para que ese nuevo anticonceptivo llamado del día después se pueda expedir en los kioskos de la salud, antes llamados farmacias, y que a ningún boticario se le ocurra negárselo a una menor de edad. Así evitamos otro problema más a los ya demasiado estresados padres y madres…
-¡Pero qué listo es vuesa merced! ¡Le beso los pies y lo que haga falta, lumbrera, que es usted un lumbrera! Supongo que el siguiente paso será rebajar la edad del voto a los 14 años para así poder recoger las nueces…
-Eso, caro Sancho, será cuando me ponga manos a la obra en la reforma constitucional, pero para eso todavía falta que llegue mi tercera legislatura y lo haga con mayoría absoluta…
-Pues para eso, señor, será preciso que cuando se acabe la segunda la crisis de los demonios haya remontado el vuelo. El gentío no va a seguir conformándose con más bálsamo de fierabrás…
-Lo de la crisis esa es pan chupao, Sancho. Para finales de año no queda de ella ni las raspas. ¡Que te lo digo yo, hombre, que te lo digo yo!
-Dios le oiga a vuesa merced. ¡Dios le oiga!
-Por supuesto que me oirá. Y si no, lo demandaré al Supremo…

domingo, 10 de mayo de 2009

CUENTO PARA ENTRETENER (1 DE 2)

 
El ingenioso hidalgo se levantó aquella mañana más optimista que nunca. Había leído las últimas encuestas y todo le iba viento en popa: la primavera acariciaba el paisaje, había bajado el precio de los dentífricos, el Barça caminaba directo al triplete y al árbol seco del jardín le habían empezado a salir unos brotes verdes. Llamó al mayordomo, al que llamaremos Sancho si ustedes no mandan otra cosa.

-A ver, Sancho. Hoy estoy pletórico. Mi cuerpo pide otra nueva iniciativa de magia potagia de champion lí. Ya la vida es bastante dura entre estas cuatro paredes (salvo cuando salgo de mitin por esos pueblos de dios) para que encima estemos llorando por las esquinas y rincones como hace esa mayoría que no sabe disfrutar de las alegrías y beldades que porta la vida. Anoche vi un partido en la BBC y, oye, ni un gramito de publicidad en sus venas. ¿Podríamos hacer algo parecido en nuestra querida RTVE?
-Mire, señor, que la cosa no está para seguir confundiendo las churras con las merinas. Que la plebe empieza  a darse cuenta que para el puchero sólo hay garbanzos y algún trozo de tocino viejo… Mire que, aunque parezca tonta, cualquier día de éstos se cabrea y nos va a mantear bien manteados…
-Siempre tan pesimista y antipatriota, Sancho. Manda que en unos cuantos meses TVE se despida de los anuncios publicitarios (salvo los institucionales míos, claro está).
-¿Y quién va a pagar lo que deje de ingresar por la publicidad, mi señor? Mire que aunque usted sepa convertir los panes en peces y cuatro más cuatro en nueve, tanto ir a la fuente mágica puede hacer que el cántaro acabe haciéndose añicos… Podríamos rebajar los cuantiosos sueldos y gastos que en esa Santa Casa disfrutan sus ocupantes. Incluso mandarles que le den un poco al cerebro y se inventen programillas baratuchos  y cultos…
-¿Pretendes decirme acaso, fiel Sancho, que algo va mal en mi Mancha particular? Me he enfrentado a molinos mucho peores que éste y de todos he salido vencedor. La TVE funciona muy bien como está, salvo los dichosos anuncios. La gente necesita divertirse, pasarlo bien, consumir y esas cosas. Todo lo que alimenta el cerebro daña la fantasía, el optimismo, la felicidad… Mi querido Sancho: estás demasiado apegado al terruño. Haz como yo, piensa en esa pobre gente de ahí afuera, esa que sólo necesita un poquito de sexo y fútbol para ser ya feliz. Quita la publicidad de nuestra televisión pública.
-No es por contrariarle pero aquí los únicos que van a salir ganando van a ser los de las teles privadas…
-Es verdad, pero la pública ya es nuestra. Así, de paso, conseguimos que lo sean las otras, aunque ya sabes –en confianza- que dos de ellas son casi de la familia…
-Pues entonces que paguen un porcentaje de sus nuevas ganancias. ¿Y el resto del parné, de dónde lo sacamos, señor mío?
-Pagarán las telecos, esas que van a su aire y que se están forrando con los piratas de la interné y los adolescentes del móvil.
-Señor, que ya sabe usted que son unas vampiresas y que al final quienes pagarán el pato, o sea, la TVE, serán esos piratas y los papuchis de esos mocosos analfabetos…
-¿Pero cómo te atreves a hablar así, Sancho de mis entretelas? Los piratas son gente honrada y los adolescentes son gente seria y responsable…
-Bueno, bueno, yo sólo sé que a muchos se les van a romper las cuerdas vocales de tanto gritarle a vuesa merced por culpa de esta idea tan mágica.
-Ah, si es por eso, no te preocupes, Sancho, espérate a mañana que verás qué nuevas ideas se me han ocurrido…

CONTINUARÁ...

miércoles, 6 de mayo de 2009

MAREANDO OTRA VEZ LA PERDIZ

Hace ya unos añitos, cuando había que cambiar las placas de matrícula de los vehículos porque la numeración antigua se agotaba, los partidos nacionalistas nos dieron la tabarra por tierra, mar y aire sobre la necesidad de que en ellas figurase sólo el distintivo territorial. Lo de la “E” de España les parecía un abuso de autoridad. Como fue Aznar quien tomó la decisión, optó por la E, claro, y eso –como es lógico- provocó aún más el enfrentamiento entre los paletos periféricos y los paletos peperos. Nosotros propugnábamos entonces que –junto a un número identificativo regulado para todo el Estado- cada conductor  añadiese a la matrícula de su coche las letras y dibujos que le diera la gana (o no añadiese nada). Como es natural, los paletos de uno y otro signo no contemplaron esta democrática propuesta pues funcionan a piñón fijo: imponer siempre “sus” ideas y principios, aunque sea usando demagógicamente palabras como “libertad”, “pluralidad” y “jamalají-jamalajó”.

Hoy, los alegres chicos de ERC vuelven a la carga pues si no se salen con la suya es que no están contentos, los angelicos. Amparándose en que ahora gobierna en “Madrid” un amiguete -que, encima, es del Barça- y que en Francia se acaba de poner en marcha un proceso de regionalización de las matrículas, pretenden que los cuatro euros que todavía nos quedan en los bolsillos nos los gastemos en cambiar nuevamente la placa del utilitario. El argumento de Francia les es muy querido (“incluso en un Estado de larga tradición centralista y jacobina” –dicen los muy cínicos),  pero si tanto les gusta la idea francesa de las matrículas bien podrían transigir también con el tipo de Estado, que en lo de republicano les encantará pero en lo de centralista y jacobino les debe oler a cuerno quemado y vade retro, Satanás. Se ve –sin embargo- que estos niñatos de papá y mamá no soportan lo de estar a las duras y a las maduras, que es a lo que estamos habituados la mayoría de la gente con sentido común.

Si ya el Puñetas tiene unas ganas locas de mandar su coche al paro para  acabar con la sangría de gastos e impuestos que semejante bicho lleva aparejada, sólo faltaría el detalle éste de la plaquita de marras para enviarlo definitivamente a hacer gárgaras. Si a los de ERC les encanta poner la bandera cuatribarrada en la dichosa placa, que la pongan, con burro o sin él, pero a los demás que nos dejen en paz, o sea que nos dejen con la matrícula actual (yo todavía tengo la anterior a ésta, o sea que...).  Dicen los que viajan mucho que están encantados de ir a cualquier parte de Spain y que su coche pase desapercibido, con el ahorro consiguiente de rotura de lunas, rayados de pintura o aperturas del maletero. El que quiera presumir de patria chica, grande o mediana tiene perfecto derecho a hacerlo añadiendo a la matrícula común de todo el Estado lo que le venga en gana: una merluza al pil pil o un percebe, por ejemplo. Porque a cuatro chiquilicuatros de ERC o aledaños les encante llevar la bandera de su patria chica hasta en los calzoncillos y bragas, no vamos a tener que pasar todos por el mismo trágala. Si son tan plurales como dicen con la boca pequeña y mentirosilla, deberían aceptar y comprender a quienes nos negamos a llevar encima todo tipo de banderas, placas y chorradas patrioteras, sean del cortijillo natal o del cortijazo global.

lunes, 4 de mayo de 2009

A LA CAZA DEL PAPA: 13 DE 271

 
Era por marzo cuando nos vendieron como noticia unas palabritas del Papa Benedicto, al que lo único que me une es la palabra “Papa”, pero en mi caso con tilde en la última vocal. La cosa salió de una televisión francesa –France 2- a raíz de una pregunta sobre el SIDA que su corresponsal en Roma hizo al Santo Padre (¿Padre de quién? –pregunto ingenuamente) cuando viajaban en avión camino de Camerún. El máximo responsable de la Iglesia Católica respondió al periodista  empleando 271 palabras, una detrás de otra; sin embargo el franchute –usando esa economía de tiempo tan habitual en las telecacas: dos minutos de información y doscientos de anuncios y bobadas- puso en boca del Pontífice sólo 13. Concretamente éstas: “no se puede solucionar este flagelo distribuyendo preservativos; al contrario, aumentan el problema”.

Como es natural (y se pretendía), pronto los teletipos corrieron la voz por el ancho mundo: ¡el Papuchi rechaza los preservativos en la lucha contra el Sida! Todos, yo el primerico, caímos en la trampa. Y no será porque no tenemos constancia fehaciente de lo mentirosos, pendencieros y camelantes que son los medios desinformativos de hoy día. Pero una cosa es que usted y yo, así como la vecina del quinto, nos creamos muchas de las patrañas de la prensa y teleles, simplemente porque nos toman por imbéciles, (o sea, a su imagen y semejanza) y otra muy distinta que gente tan aparentemente seria e informada como los diputados del parlamento belga o de la OMS se crean a pie juntillas las 13 palabritas puestas en boca del Papa por France 2, como si fuesen a misa y como si el Papa también fuese subnormal. Así que les faltó tiempo a los parlamentarios belgas –cuyo país tiene serios problemas de toda índole menos el religioso- para condenar las palabras del Papa.

La bola ha seguido creciendo y acto seguido, según leo en el diario El País, “IU-ICV quiere que todo el Congreso de los Diputados, en representación del pueblo español, diga si también le parecen escandalosas las palabras del Papa. Para ello ha presentado una proposición en la que se critican esas palabras y se pide que el Gobierno se pronuncie en contra de las mismas y proteste formalmente ante el Vaticano”. Al parecer la proposición ha sido admitida a trámite por la Mesa camilla del Congreso y pronto tendremos a don Llamazares y otros ilustres sabios de nuestra política doméstica lanzando sapos y culebras contra don Benedicto. Naturalmente, en representación del pueblo, al que ellos pretenden liderar en todos los órdenes de la vida, incluyendo el religioso, el moral, el sexual y hasta el deportivo. De extender la argumentación a otros personajes en el Congreso pronto veremos reprobaciones al presidente del Real Madrid por sus famosos “chorreos” o al dueño de Mercadona por retirar de sus estanterías cientos de artículos de marca.

El quid de la cuestión es si gente como nuestros diputados o el diario El País, se han leído enteritas las 271 palabras del Papuchi, enterándose de primera mano (hay videos, por ejemplo) sobre lo que dijo realmente y no sobre lo que el periodista francés dijo que había dicho, en un ejercicio tan cagarrutero de su profesión que a estas horas ya debería estar cobrando el subsidio del paro. Tiene uno la impresión que aquí pocos se han dedicado a tan sagrado menester porque lo que prima, por encima de todo, son las razones ideológicas, o sea, la pura miserabilidad.  Miren por donde, el Puñetas sale hoy en defensa del Papa Benedicto, víctima de dos poderes más influyentes que el suyo, claramente de capa caída desde hace varios siglos: el mediático idiotizante y el político bananero.  En IU justifican que “esta no es una cuestión religiosa, es salud y ciencia". Será que como Llamazares es premio Nobel de Medicina… Sea el asunto catalogado como ciencia o fenómeno paranormal, lo primero que hay que hacer es leerse los papeles y ver los videos correspondientes. Más que nada porque se puede uno quedar con el culo al aire, aunque a estos tipos de Izquierda Hundida (por ellos mismos, claro) lo que les importa de verdad no es la verdad si no montar el numerito a ver si así consiguen algún votante más a costa del Pontífice. Como si el Papa de Roma le interesase a alguien cuando vota en unas elecciones…