viernes, 29 de junio de 2007

"PALABRAS DE DIARIO"

Rara vez escribo sobre un libro, pero éste me ha encantado, emocionado y evocado mil cosas. No será un best-seller ni le harán puñetero caso los plumillas de los mass media, pero quizás el boca a boca consiga que seamos mil, cinco mil o diez mil quienes nos deleitemos con su lectura, con “lo pequeño, lo cercano, la memoria, el asombro, el imposible olvido, el amor, la lluvia, la pena, el silencio, la muerte.., la carne y el alma, la ausencia, el placer y el vértigo de los sueños”.


Su autor es Antonio García Barbeito, escritor, poeta y periodista de Aznalcázar (Sevilla). Se llama “Palabras de diario” y en marzo salió la primera edición en Ediciones B. Una joya (está formado por 143 textos independientes) para leer en voz alta, en el silencio de la noche, bajo la sombra de una higuera o con el murmullo del mar al fondo, en una cala semidesierta. O tranquilamente sentado en casa, alejado del ruido y la telemugre. Una buena ración de literatura, refrescante, intimista, profunda. “Don Antonio coge el bisturí, aplica el sedante de la poesía, abre a España en canal, azota al poderoso, restaura el sentido común e incendia con la palabra disfrazada de ternura el país de los ineptos, el país de los corruptos, la nación que le apasiona”. (Extraído del prólogo). Y todo ello desde el campo, el pueblo, el frío y la calor, como telón de fondo de las grandes preguntas del hombre y del universo.


Con un lenguaje sencillo pero profundamente poético, jamás este libro llegará a los grandes consumidores, ni siquiera de la literatura. Pero si –amigo lector- quiere echarle un ojo, aquí va uno de esos 143 textos. Le aseguro que los restantes son tan buenos como éste.


CEGUERA


Está de mudanza. Y anda triste. Al dejar la casa, en la que ha vivido los mejores años de su vida, le queda una honda tristeza de emigrante obligado que tuviera que romper el diario del pueblo acostumbrado, de sus gentes, de su labrada comodidad.


Recuerdo cuando vino. Eran los primeros días de un año difícil para él, y le costó hacerse al hogar y a la zona. Pero aquella casa se fue convirtiendo poco a poco en lo que an­daba buscando siempre: paz, luz, anchura y profundidad de paisaje... Y un río cerca. El solitario halló la horma del in­quieto pie de su vivir. Y la hizo suya, celoso y amante de ella; se abrazó a sus paredes como a la mujer amada con desco­nocida pasión.


Aquí luchó por sus últimos días de la cárcel laboral que lo aprisionaba y aquí conoció, ganada a pulso, su liberación. Verlos juntos —a él y a la casa— era pensar en una pareja compenetrada. Aquí rompió amarras, aquí despejó dudas, aquí labró ilusiones... Y amó como nunca pensó amar. Y gozó como nunca pensó gozar.


Y se va. Y le duele como si le arrancaran las raíces. Sabe que esta casa es un granero de sueños y realidades que le ha dado para muchas siembras. Aquí ha reído, ha llorado, ha cantado... Y también ha cenado muchas veces pan de sole­dad que nadie entendería nunca. Por eso, cuando remueve armarios, cajones, cajas..., y los días —los años— empiezan a salir, a resucitar, siente que allí, en esas cuatro —son cua­tro— paredes se le queda encerrada más de media vida. Está deshaciendo la casa y parece que se estuviera deshaciendo él. Se va porque quiere y porque, además, le esperan una paz, unas luces y un paisaje más anchos, pero esta pequenez que le cabía en un solo ojo es ya un mundo dentro de él.


Y se va. Pero sé que muchos días —muchos años—, al pasar por aquí, mirará para estas ventanas como para un reino perdido, como se mira un amor que se soltó del bra­zo del corazón.


Y si pasa y no quiere mirar, otras tardes, al mirar otro paisaje, se le cegará la mirada y, como una mano pegada a los ojos, sólo podrá ver lo que recuerda. Pasa siempre que uno se arranca la felicidad en flor.

martes, 26 de junio de 2007

UN MATRIMONIO QUE A VECES TIENE CADA COSA...


Ya no somos dueños ni de nuestros huesos. (Del alma y de las neuronas, hace tiempo que dejamos de serlo, destrozadas por la propaganda, la religión, la política y por tantísimo capullo destripacerebros como pulula por ahí).


Seis soldaditos españoles, o colombianos o bolivianos han sido casi evaporados por un bombazo, no terrorista sino guerrero, allá por el Líbano. Y mientras don Zapatero, presunto Jefe del Gobierno, saldrá un día de éstos diciendo que nuestro ejército está por aquellos pagos en misión de paz, un famoso juez ha dictado orden de que los huesos de los pobres soldados deben seguir a disposición de un alto Tribunal por si algún día, mes o año de éstos ha lugar a que los forenses se los trajinen de nuevo en busca de no se sabe qué arcanos detectivescos. Ya digo, ni muertos, nuestros huesos nos pertenecen, sino a papá Estado y mamá Justicia, que incapaces de garantizar decentemente nuestra seguridad en lugares donde Cristo perdió el gorro y a nosotros no se nos ha perdido nada (con lo baratitos que resultan unos inhibidores de frecuencias asesinas), sí tienen la capacidad de adjudicarse gratuitamente la posesión de nuestra osamenta por si algún día ha lugar alguna posibilidad de investigación en plan Mortadelo y Filemón.


Y con el mismo talante que este matrimonio tan decadente se apropia de los huesos achicharrados de unos militares prácticamente adolescentes, casi con 25 años de retraso, es capaz de meter en la cárcel a un señor de 76 tacos al que por aquellas lejanas fechas un gobierno primerizo pero hábilmente trilero le birló la cartera, el donut y todas sus empresas para revenderlas luego a precio de saldo a los amiguetes y mantenidos del presi y de algunos ministros. Todavía vive Ruiz Mateos, los tiempos son duros de pelar y con su histrionismo siempre será capaz de distraer al personal frente a otros asuntos más serios y complicados en que papá y mamá andan metidos hasta el corvejón.


Pero antes de entrar hay que dejar salir. Por ejemplo, a uno de los psicópatas que violaron, asesinaron y destrozaron hasta la vileza más inhumana a una chavala en la flor de la vida, llamada Sandra Palo allá por 2003. Los noticieros nos recuerdan que la pobre tenía disminuidas sus facultades mentales, aunque en realidad quienes las tenían bajo mínimos eran aquellos criminales. En vez de esperar a que las recuperen a la sombra de las rejas carcelarias a lo largo de una veintena de años, han bastado cuatro primaveras (mamá Justicia es que tiene unas varas de medir bastante caprichosas) para que Rafita –que así se llama el primer criminal liberado- se vaya a un piso pagado por los contribuyentes para rehacer su pobre vida, todavía juvenil y prometedora. Ya se sabe, el muerto al hoyo y el vivo al bollo, que por muy criminal que sea, de él se ganan el sueldo policías, jueces, educadores, funcionarios de prisiones y mucha más gente. Con los muertos sólo hacen caja las funerarias y luego los gusanos. Con permiso, eso sí, de la autoridad competente…

viernes, 22 de junio de 2007

NO PIENSO VER A LOS ROLLING STONES


Por fin ya tenemos por las Hispanias, durante una semanita y cuatro macroconciertos, a sus “Satánicas Majestades”, o sea, los Rolling Stones. Probablemente sea la banda de Rock n' Roll más grande del mundo, con más de 50 álbumes, de los que llevan vendidos alrededor de 200 millones. Uno hasta le tiene querencia a una docena de sus canciones, pero no soy forofo de ellos, ni de nadie. Frente a tanta bobada y adulación azucarada como están derramando los mass media y mucho personal de a pie sobre estos tipos (que ya calzan los sesenta tacos, aunque siguen teniendo la inteligencia de un bebé), el Puñetas afirma más chulo que un ocho que no piensa verles el pelo ni aunque le regalen la entrada.


Porque en un concierto de los suyos uno tendría complejo de hormiga. Porque su música en directo está llena de ruido decibélico que destroza los tímpanos y las neuronas. Porque trabajan poco y cobran mucho. Porque la música bien entendida no es juntar a 50.000 almas o almejas en un recinto y aplastarlas a golpes de caderazos y mucho colorín destellante. Porque siempre han sido incapaces de actuar en un pequeño local, sin micros ni altavoces, que es donde el artista muestra su autenticidad y valor. Porque sus espectáculos son un derroche de energía y contaminación. Porque ya no son lo que eran. Porque su público les importa un carajo. Porque estaban borrachos cuando, en un video, saludaron al pueblo andaluz vendiendo su próximo concierto en el Ejido almeriense. Porque venden la imagen de unos malos chicos cuando siempre han sido unos avispados vividores, caprichosos y aniñados. Porque sus coqueteos con la droga me revientan. Porque llevan más de 40 años encima de un escenario repitiendo el mismo número y aprendiendo poco. Porque la arruga no es bella. Porque no me gustan los megalómanos.


En fin, creo que se nota que estos gachones no me caen simpáticos. A nadie le importa, claro, pero este empacho de Rollings, esta idolatrización bananera de la banda a cuenta de su llegada a España, me parece una visión exagerada y poco realista. Hay otras bandas y otros grupos de rock (algunos ya desaparecidos) que, sin armar tanto ruido, con buena música, mejor preparación intelectual y una formación ética muy superior, han pasado más discretamente por el habitualmente inane firmamento musical. Desde el principio el Mercado vendió a estos amantes de las cogorzas como iconoclastas y polémicos. Pura engañifa. ¿Satánicas Majestades? Dejémoslo simplemente en vendedores de humo, camisetas, lengua y modales horteras. Sí, con un buen ramo de importantes canciones, pero aquí hoy no hablamos de música.

martes, 19 de junio de 2007

EDUCACIÓN PARA LA CIUDADANÍA: NI MILAGROS NI SECTARISMO


Andan las aguas revueltas sobre la nueva asignatura que el Gobierno pretende meter con calzador en el pie semidesnudo de la educación obligatoria: Educación para la Ciudadanía. Como en casi todas las reformas de este tenor, hay quienes las ven como panacea que alumbrará un hombre y un mundo nuevo, mientras que para otros la cosa es otra vuelta de tuerca a favor de la ideología de los gobernantes. Para unos, bastará con impartir un par de horas semanales de esta asignatura para que, como por arte de magia, desaparezcan ciertos comportamientos incívicos de nuestros jóvenes, hartos de todo aunque porten una maleta repleta de nada. Para los detractores de la nueva asignatura, lo que se pretende es adoctrinar a las futuras generaciones en valores discutibles o, cuando menos, que no son patrimonio sino de una parte de la sociedad.


El Gobierno, con esa meapilez que le caracteriza, lo dejó clarito en la presentación de la asignatura: “Enseñará a los alumnos a aprender a reunirse desde muy pequeños, a discutir aceptando la opinión del contrario y a elegir a sus representantes, entre otras cuestiones. Se trata de educar a los niños y adolescentes en el ejercicio de sus derechos y de sus libertades”. A lo que el Puñetas responde con el famoso grito de guerra de los escépticos y descreídos: tururú… Ni hará mejores ciudadanos ni hará mejores borregos, como dicen los fanáticos de uno y otro signo.


No hay quien se lo crea. Ni el nuevo tenderete será una reedición de aquella famosa “Formación del Espíritu Nacional” del franquismo, ahora en versión democrática y progre. Ni será pura y lisa “comedura de coco” de las mentes infantiles. Los que saben de la tiza, las aulas y esas cosas, conocen la cruda realidad: no hay magia potagia en la educación, porque esta es un fiel espejo del sistema social. En los coles e institutos, hasta en las clases de matemáticas, se intenta inculcar en los alumnos valores tan nobles como el diálogo, el respeto, la amistad y esas cosas que hoy día han quedado casi obsoletas. Frecuentemente los buenos deseos docentes quedan en el simple intento porque en la vida real esos valores no se viven en los mass media, en el famoseo, en la política, en las finanzas, a veces, ni siquiera en la familia.


La asignatura de Educación para la Ciudadanía es otro ejemplo más de propaganda gubernamental y de contra-propaganda de las sotanas y aledaños. Es como empezar la casa por el tejado. Los autistas del poder terrenal y celestial (los unos, sólo escuchan en periodos electorales; los otros, sólo cuando llega la declaración de la renta) se creen que nos chupamos el dedo. Que se lo digan a los profesores, por ejemplo.

viernes, 15 de junio de 2007

OTRO ENGAÑO ELECTORAL: LOS POLÍTICOS DESERTORES


Se constituyen, por fin, los Ayuntamientos democráticos después de varias semanas de chalaneos, devaneos, mamoneos y cachondeos entre las fuerzas políticas con aspiraciones de mando. Afortunados aquellos lugares en que algún partido alcanzó la mayoría absoluta por sí mismo, porque ellos han tenido la fiesta en paz.


Pero la cuadratura del redondo circo electoral no acaba sólo con la confección artificial de las mayorías de gobierno, en las que muchas veces los más favorecidos son los partidos minoritarios en votos. Ni acaba con la reedición de los pactos ya habituales entre los partidos políticos de siempre, pese a lo cual siguen siendo incapaces de coaligarse antes de las elecciones (como sería lo natural y sensato). La última engañifa tiene lugar cuando algunos significativos elegidos deciden que lo suyo no es estar cuatro años chupando oposición (haciendo el canelo) en el Ayuntamiento. Ellos, elegidos de los dioses, aspiraban a mangonear, a chupar poder, a trabajar en primera fila para los ciudadanos. Así que, frustradas las expectativas y apetencias, deciden largarse a otros menesteres más provechosos, dejando su compromiso electoral en el limbo de las mentiras. Un corte de mangas a aquellos electores que les dieron su confianza. ¿O da igual Pedro que Paco, aunque ambos sean del mismo partido? Yo creo que no...


Por citar sólo algunos casos del terruño por donde andurreo, se larga Pedro Pacheco ("por el bien de Jérez" -ha dicho) porque él no está para posar su aristocrático culo en la oposición municipal jerezana. Se larga Enrique Bolín, cabeza de lista y alma máter del GIB-Bolín de Benalmádena pues –dice el ex alcalde- “conmigo en la oposición sería muy difícil gobernar”. Se marchan algunos segundos espadas de la lista psocialista del Ayuntamiento de Málaga, tras la mayoría absoluta del PP. Los pusieron ahí para hacer bulto y nombre si sonaba la flauta, pero ante el fracaso electoral prefieren seguir en sus actuales cargos de la Junta de Andalucía. Se marchará Paulino Plata, otro psocialista, tras no lograr conquistar a la guapa chica de Marbella. Ante su espantá, quisiera ver el careto que se les va a quedar a los pocos incautos e ingenuos que le votaron.


Estos desertores abandonan el barco ante la derrota, dan un corte de mangas a sus votantes, reniegan de su inicial compromiso político con la ciudad. Como para fiarse de ellos la próxima vez…

martes, 12 de junio de 2007

QUIEN CRITIQUE A LOS JEFES, A LA PUÑETERA CALLE


Hay por el País Vasco una socialista del PSOE que ejerce de lo primero antes que de lo segundo. Con lógica razón, pues antes es el huevo (las ideas, los principios) y luego viene la gallina (la práctica política y el partido). La eurodiputada Rosa Díez viene mostrándose enormemente crítica con la dirección del PSOE por la torpona y abstrusa manera de enfocar la lucha antiterrorista que ha tenido y tiene el actual presidente del Gobierno y su guardia pretoriana. Ya sabíamos que Don Zapatero ríe mucho pero trabaja poco. Para eso tiene, el muy feminista, a la señora de la Vega, que le hace los trabajos menos gratificantes. Pero ya sabemos también que, al menos en la política antiterrorista, el señor Rodríguez trabaja con escaso éxito. De ahí que Rosa Díez afirme, categórica, que en el asunto del fin de la tregua de ETA, la organización criminal es la culpable, pero el Gobierno de don Zapa tiene claras responsabilidades. Por meterse en berenjenales condenados al más sonoro fracaso, un suponé.


Doña Rosa, tan casquivana y echada para adelante, está poniendo en un serio aprieto a mucha militancia y dirigentes psocialistas, que de boquilla siempre presumen de críticos, progresistas y tal, pero que en realidad son la voz de su amo, la voz de los que no tienen nada que decir ni pensar porque de ello ya se encarga la dirección del partido. Ellos se limitan a obedecer, a repetir consignas, a lamer los zapatos de sus superiores y a cobrar a fin de mes, que es lo que verdaderamente importa. Pasa en el PSOE, pasa en el PP y pasa en todos los partidos, salvo algunas aguerridas excepciones, como la de Rosa Díez.


Así que algunos lameculos no sólo están siempre con los jefes sino también contra los escasos disidentes o críticos. De pelotas devienen en miserables. Un buen ejemplo es un tal Miguel Buen, secretario general del PSE en Guipúzcoa, que ha reclamado ante el máximo órgano del PSOE un expediente de expulsión a la eurodiputada Rosa Díez. “Menoscaba la imagen de los cargos públicos” –ha dicho. Efectivamente: su ejemplar y crítico comportamiento muestra, por contraposición, la borreguil conducta de los que sólo tienen una idea política: lo que tú digas, jefe. Demócratas de pacotilla, no toleran la discrepancia. Argumentan problemas de imagen cuando lo suyo es un problema de ideas. Y éstas no se expulsan ni se destruyen. Si no estuviesen amparados por unas listas electorales cerradas, a estos tipos no los votaría ni su padre. Por eso, dentro de los partidos, los jefes y jefecillos huyen de los debates internos, de las voces críticas, de las primarias y de las listas abiertas. Pandilla de inútiles…

viernes, 8 de junio de 2007

LOS MAJARONES Y EL AMNÉSICO


Cuando llegó al poder quiso pactar con la bestia (como todos), creyendo que le bastarían las mismas artes trileras que se traga el pueblo llano y pacífico: unas promesas por aquí, unos engaños por allá, una sonrisilla seductora por acullá. Si eres capaz de ganarte para la causa a más de diez millones de personas a las que no conoces de nada, ¿por qué no vas a poder embaucar a unos pocos hijos de su madre?


Al cabo de un tiempo, el Presi ha comprobado que -como les ocurriera a sus predecesores en la Moncloa- la bestia no atiende a razones. Y como está formada por una reata de majaras que se creen los únicos depositarios de las esencias vascas y de la merluza al pil, pil, ha roto la baraja, le ha llamado fascista y ya está pensando en los efectos especiales que aplicará contra la dictadura española en los episodios terroristas de la nueva temporada. Todo el mundo al suelo. Ya digo, unos majarones que no tienen cura ni con un ejército de psiquiatras a su disposición las 24 horas del día.


Así que se acabó el percal, y el colorete mágico, y el irte a casa con la pulsera en el sobaco y el qué buen hombre de paz eres, querido Arnaldo. Ahora el señorito del talante se ha cabreado por el desprecio de la bestia encapuchada con boina, así que ya ha empezado a recular, aunque sin hacer gesto alguno de autocrítica. (La oposición, como está mandado, tampoco). Y con la misma ley, donde antes excarcelaba, ahora enchirona. Tenemos unas leyes penales que son como el chicle, que dan de sí todo lo que quieran algunos jueces estrella y los fiscales y ministros de la cosa. (Lo que hace tiempo llamaron desde las esferas del poder “la adaptación de las resoluciones judiciales a las condiciones sociales imperantes” y que otros llamamos simplemente “pasteleo judicial”).


Ya por noviembre, el lumbreras del Puñetas daba por finiquitado el “proceso de paz” zapaterino. A finales de diciembre los majarones pusieron dos muertos sobre la T4 de Barajas para seguir jugando a los soldaditos. Ahora, rearmados hasta las cejas y con la caja de caudales a buen recaudo en la despensa de muchos ayuntamientos vascos (al final, el burlador Zapatero ha sido el burlado), han decidido seguir haciendo el imbécil otro curso más. Hasta que llegue otro amnésico a la Presidencia del Gobierno y vuelva a intentar camelarse por las buenas a la puta serpiente. ¿Qué se apuestan?

martes, 5 de junio de 2007

SE BUSCA LETRA PARA UN HIMNO


Anda el Comité Olímpico Español detrás de los peseteros de la Sociedad General de Autores para que algún insigne miembro de ésta escriba una letra incolora, inodora e insípida con la que aderezar el himno nacional español, el cual no puede ser cantado ni tarareado por nuestros deportistas cuando se echan una competición con gentes de otros países. Mientras franceses, rusos, americanos, italianos, ingles o alemanes vibran de emoción y de adrenalina patriotera al cantar sus himnos respectivos, los españoles tienen que callarse como muertos porque su himno sólo tiene música. Con lo que nos gusta a nosotros hacer ruido… Así, claro, luego salen desmotivados a los campos de juego y no logran los triunfos que serían deseables en un país que está entre los diez primeros del mundo en cuanto a nivel de desarrollo y tal. Eso, naturalmente, no puede ser…


El problema de poner letra al himno (cuya música también habría que cambiar pues es horrorosa) es que los cuarenta millones de paletos que vivimos en el país común no nos pondríamos de acuerdo ni tan siquiera en los puntos y comas. De modo que el Puñetas ve más fácil que se eleven a la categoría de himno algunas de las canciones más famosas y canturreadas de nuestra historia: “Y viva España”, “Macarena”, “A por ellos, oé, oé” o el famoso Achilipú de aquella mujer bravía cuyo nombre ya presagiaba furia y lágrimas: Dolores Vargas, la Terremoto.


Achilipú,apú apú,achilipú apú apú, achili,achili achili chili, achilipu,apú apú…


¿Quién podría oponerse a esta letra tan racial y, a su vez, tan políticamente correcta? Ni los paletos nacionalistas tipo “abertzales neandertalensis”. Todo el mundo de acuerdo. Y si buscamos algo más melódico que pueda ser tarareado hasta por los niños de pecho siliconado, ¿qué tal aquel famoso “La, la, la” que nos abrió las puertas de la liberal Europa en 1968, cuando aquí vivíamos la negra noche del franquismo? “La, la, la, la, la, la….” Podríamos hacer –además- versiones en catalá, euskera, bable, andalú, valenciano y hasta en castellano-manchego, con lo que ninguna de las 17 autonomías tendría que sentirse despreciada o disminuida por el himno común.


Claro que si por mí fuera, arramblaría con todos los himnos y banderas, pero tengo la impresión de que en esto, como en tantas cosas, sólo soy una insignificante minoría.

viernes, 1 de junio de 2007

EL CINE ACTUAL, UN TRATADO DE PSICOPATOLOGÍA


No sé qué me pasa, doctor, pero cuando alguien me propone asistir al último estreno de la película de moda, empiezan los picores a recorrer mi cuerpo serrano y la urticaria se adueña pronto hasta de mi alma. Como casi siempre suele ser una peli norteamericana, llena de acción, aventuras y tropecientos efectos especiales de ordenador, suelo escaquearme del asunto diciendo el ocurrente…


-Chico, esa ya la he visto.

-¡Pero si la van a estrenar en España pasado mañana!

-Es que me la bajé del interné ese… Además, que ya estoy harto de ver el Capitolio, el puente de San Francisco, los cochazos de los yanquis, las escenas de restaurantes de pega con sabrosas hamburguesas y, sobre todo, harto de ver toneladas de tomate cubriendo decenas de cuerpos despanzurrados por bombazos, tiroteos y otras lindezas.

-¡Tú lo que eres es un rácano, que no quieres soltar los 8 euros que cuesta el espectáculo, más los 5 de las palomitas y la cocacola!

-Uf, encima eso. Soy alérgico al maíz transgénico y con la cocacola me sube la tensión… Estoy hecho un asco, chaval…


Hoy, doctor, quiero decirle que lo mío es más grave. Pienso que casi todos los directores y productores de cine son unos psicópatas, visto que la mayoría sólo se interesan en las terribles historias de los asesinos en serie, del narcotráfico, de la mafia… Yo, que soy un ser absolutamente normal, jamás podré ser el inspirador de un guión para una futura película de éxito. Verás como el De Juana Chaos ese tiene un peliculón en cartelera dentro de unos años. Si hasta el guaperas del Kevin Costner acaba de meterse en la piel de un asesino con una doble vida... Y los hermanos Cohen han presentado en Cannes una cosa “nueva” sobre los amables chicos del narcotráfico, llena de balazos y sangre. Y el Tarantino, otro tanto… A este paso las pantallas cinematográficas van a chorrear sangre de verdad.


El buen hombre me ha mirado de reojo con una sonrisa maligna, ha sacado del cajón un puñal XXL y ha intentado clavármelo en el hueco de la tercera vértebra intercostal. He logrado devolverle la jugada, y la mía ha sido más efectiva. Se lo he clavado en pleno ojo derecho (ya jamás podrá votar al PP) y luego hemos proseguido la danza de muerte y asco hasta dejar la consulta hecha un plató de cine moderno. Alguien ha dicho “corten” y todos hemos aplaudido. Tras salir de aquel garito nos hemos ido a protestar por la guerra de Irak y todas las guerras del mundo bajo una pancarta gigante donde se leía con letras bien claritas: “Violencia, no. Paz y requetepaz”. Pues eso…