martes, 28 de febrero de 2006

ROMERO, EL PASQUINERO



Hacía tiempo que no sabía nada de Antonio Romero, diputado de IU con muchos trienios a sus espaldas (varias legislaturas anduvo por el Congreso de los Diputados) y miembro actual de la Mesa del Parlamento Andaluz. La última hazaña que le recuerdo fue verse en los juzgados acusado de arrear un mandoble a un ciudadano que tomaba unas cañas en un bar, al que don Antonio y un grupo de piquetes fueron para “informar” que tenía que echar el pestillo al negocio aquel día porque había huelga y las huelgas están para cumplirse a rajatabla y sin miramientos si las convoca IU.


Cuando el Puñetas le creía durmiendo la siesta en su kioskillo del Parlamento, por el que cobra la respetable cifra de 85.571,26 euros anuales, el otro día volvió a las andadas de sus ya clásicos numeritos dedicándose a repartir en el Parlamento –como si aquello fuese un mercado de abastos- unos pasquines con el titular de “la derecha de ayer y hoy: 1932-2006”. En ellos explicaba nuestro desilustrado que en 1932 la derechona de entonces ya vociferaba esto: “¡Español! ¡Guerra al Estatuto catalán” y planteaba un boicot a los productos catalanes. Según él, lo mismo que hoy.


Antoñico ha dicho que lo suyo es pura y llana libertad de expresión como diputado pues leyó en el pleno el pasquinazo y luego repartió ejemplares al resto del diputaje por si más de uno no se había enterao. ¿Anécdota, morancada, estupidez o simplemente que este hombre da lo que tiene? Pues las cuatro cosas juntas. Ahora sólo hace falta que los del PP saquen pasquines sobre las maravillas que la izquierda cometía por los años 30 y que luego pasemos de las palabras a los hechos, primero recurriendo a los pistoleros de uno y otro signo y luego acabando por sembrar la semillita de una nueva Guerra Civil. Es seguro que el inconsciente del Romerín no pretende llegar a tanto, pero por cosas más tontas que un pasquín del año la pera –pongamos una caricatura de Mahoma- se está liando la que se está liando en medio mundo. Antoñito, dedícate a dormir la siesta en el escaño y a cobrar, que así serás más eficaz y cumplidor que repartiendo pasquines del año catapún, pum, pum.

viernes, 24 de febrero de 2006

23-F: TODOS EN EL SUELO



Acaban de pasar 25 años y un día desde aquel 23 de febrero en que un zumbao con tricornio asaltaba el Congreso de los Diputaos pegando tiros y ladrando al grito de “¡Todos al suelo!”. Y los allí presentes se fueron todos al suelo. Cagaditos de miedo, temiendo por sus vidas aunque sus vidas en aquellos momentos eran la soberanía popular, la resistencia ante la barbarie y la estupidez representada por aquel pelanas con bigote y una cuadrilla de titiriteros acompañantes. Sólo hubo tres representantes del pueblo que supieron mantener la vergüenza torera y la gallardía personal: Adolfo Suárez, presidente del Gobierno, al que los allí presentes venían poniendo zancadillas todos los días (incluida la gente de su partido); el general Gutiérrez Mellado, demostrando que en las fuerzas armadas hay gente que vale un potosí y que los tiene bien puestos y Santiago Carrillo, ese pedazo político que en todos los líos en los que se ha metido en su vida ha sabido salir con el cigarrillo incólume en la boca.


Sólo tres tipos supieron mantener el tipo. El resto, en el suelo como las colillas. Y los que no andaban por el Congreso, sobre todo los que pastaban cerca de las fronteras francesa, portuguesa y marroquí, preparando a toda leche la patera, el coche y la mochila. Con la valentía por bandera. La misma que ahora han enarbolado en una declaración institucional para mentir farisaicamente diciendo que aquel chapucero golpe de Estado lo pararon ellos, los ayuntamientos, los sindicatos y la madre que los parió. El Rey, no, que estaba esquiando en Baqueira y cuando se enteró ya se le había pasado el arroz.


Si son capaces de mentir tan burdamente con hechos que más de medio país vivió en directo, ¿qué no serán capaces de hacer contando batallitas sobre la Guerra Civil, la España de los Reyes Católicos o las reuniones a escondidas sobre el Estatut, la ETA o la dichosa OPA? Oiga, en el suelo como las colillas. Todavía siguen ahí.

martes, 21 de febrero de 2006

EL HISTORIADOR QUE NO SABE HISTORIA



El otro día un fulano que dice ejercer de historiador (Irving es su nombre) fue condenado a tres años de prisión por un Tribunal de Viena por haber negado la existencia de las cámaras de gas y el Holocausto judío. Incluso llegó a afirmar que Hitler había protegido a los judíos.


Como en Austria no tienen la Justicia pachanguera y verdulera que tenemos en España, lo han declarado culpable. En Alemania tiene prohibida su entrada y en algún otro país igual de serio. Y es que hay que echarle morro y desvergüenza al asunto. Uno podría comprender que alguien justifique un hecho como el extermino de los judíos. O que disminuya su importancia. O que lo banalice. Pero lo que nadie en su sano juicio puede comprender es que se niegue una realidad histórica de la que hay pruebas por tierra, mar y aire. Es como si el tal Irving dijese que la Segunda Guerra Mundial no existió o que es un cuento chino el bombazo nuclear a Hiroshima.


Esta negación de la historia realizada por un historiador de profesión no es una metáfora o gilipollez. Es, simplemente, la constatación de que los mayores farsantes históricos se encuentran entre miembros de dicha profesión. Como cuando hace unas semanas, y en el ámbito pueblerino del Estado español, el historiador Santos Juliá escribía en EL PAIS que “Blas Piñar ha resultado ser un bendito de Dios al lado de Acebes”. Hombre, don Angelito no es precisamente San Zapatero, pero de ahí a compararlo con el líder ultraderechista de la extinta Fuerza Nueva…


En fin, que hay tanto ciego por el mundo de la historia de los historiadores que podría crearse una rama especial de la ONCE con derecho a sorteo del Cuponazo Mentiroso. Atentos a la película porque quizás dentro de unos años, algunos nos venderán que ETA nunca existió. Vamos, que –como ha dejado escrito el tontoelhaba del Invirg- el autor de las muertes atribuidas a la banda fue el tifus y nada más que el tifus.

viernes, 17 de febrero de 2006

DEMASIADOS CERDOS Y CHORIZOS



Viendo la que está cayendo por las Hispanias de un tiempo a esta parte, piensa el Puñetas que en vez de estar conjuntando una gran “sociedad” estamos formando una enorme “piara”. Por fortuna, todavía la mayoría del paisanaje conserva los genes del humanoide primigenio, pero cada vez más la confusión y la mezcolanza genética están derivando hacia especímenes más cercanos a la genealogía cerdil que a la del homo sapiens. A ello contribuye no sólo el desnortamiento general, creado y amamantado por los medios de incomunicación, sino también la ineficacia de un sistema educativo incapaz de amansar a las fieras y de un sistema político, económico y judicial que se basa en una máxima exclusiva: “coge el poder y el dinero y corre”. Y que es excesivamente complaciente con el mentiroso, el ladrón, el asesino y la basura.


Hace unos días más de cinco mil mozalbetes, la mayoría estudiantes universitarios, se reunieron improvisadamente en la Sevilla “que no se pué aguantá” para celebrar el fin de los exámenes de febrero tomando alcohol hasta reventar dejando –de paso- las calles y jardines del barrio tomado al asalto como un corral donde hubieran pacido cinco mil cerdos de la estirpe ibérica. Con una diferencia: los pobres animales dan al final de su vida unos jamones de chúpate los diez dedos, mientras que estos cerdos a dos patas no darán ni una raquítica chuletilla o lomo embuchao. Más que en la Universidad parece que estudien en una dehesa y más que leer libros parece que coman bellotas. Y no es que este botellón sea una excepción. Es un hecho cotidiano todos los fines de semana, pero de vez en cuando se permiten uno extraordinario. Tiene bemoles la cosa.


Si pasea por cualquier antro llamado “ciudad” verá usted que no hay pared limpia de pintadas, farola a salvo de papeles anunciando todo tipo de cosas, aceras enmierdadas con la ídem de esos/as cerdícolas que suelen ir con un perrito faldero a su diestra o siniestra. Si mira hacia arriba, vidente será si logra ver las estrellas con tanta polución y cacurria como tiene el aire que respiramos. No digamos la cantidad de basura que producimos diariamente y que echamos al contenedor, sin olvidar los kilos que nos metemos entre desayuno, almuerzo, merienda y cena. Así andamos, que ya somos el primer país de Europa en presumir de gordura. ¡Quién nos ha visto y quien nos ve!


Pero, claro, donde hay tantos cerdos, tiene que haber chorizos a mansalva. Y si los primeros son especie protegida por teles, políticos, policía, jueces, profesores y otras gaitas, no vea usted con qué mimo y reverencia se trata a los chorizos, sean de la rama raterillo, de la criminaloide o del ramón político-terrorista. Llevamos ya bastantes años en que los chorizos de dos patas campan a sus anchas por la gran piara autonómico-social-hispánica sin que nadie les toque más pelo que el que pueda rozársele con un leve tirón de orejas equivalente al “eso está muy feo, la próxima vez que vuelva a matar a otro desgraciao, le vamos a meter en la trena durante un par de horas, para que se entere”. Y así, con una ligereza de escrúpulos cada vez más ligera, asistimos al espectáculo de una cada vez más frecuencia de asaltos a viviendas, asesinatos por parte de bandas y sicarios, matanzas de señoras a cargo de sus queridísimos machos cabríos, adolescentes que mean y aniquilan a indigentes, infantes que acosan y torturan a niñas indefensas o disminuidas, capullos que cogen el coche para cepillarse a cualquiera que venga de frente o de lado y terroristas que ponen bombas llamadas “paz” con el silencio bochornoso del gobierno pancista de turno. Y es que el delito por estos pagos está empezando a salir demasiado barato.


Si llamas a la policía ante un problema o a una ambulancia, no llegarán en un par de horas si es que llegan, pero si eres un desalmado que –como hace unos días- atraviesa medio Madrid en loca carrera con un camión robado, destrozando todo lo que encuentras a tu paso y al final chocas contra la Puerta de Alcalá, al medio segundo tendrás tres cuartos del cuerpo de policía a tu lado, ochenta bomberos intentando sacarte del camión destrozado y diez ambulancias con todo el instrumental médico preparado para curarte la pupita que te hiciste. Milagros asistenciales que sólo se consiguen si eres un chorizo redomado y has cometido una charranada. Y si tienes a tus espaldas un mayor historial, como muchos asesinatos -por los que hipócritamente te condenaron a mil años-, en caso de que pertenezcas a una organización mafiosa o a una político-terrorista, en cuanto tengas una o dos décadas carcelarias te echarán deprisita a la calle con una palmada en la espalda y un certificado de rehabilitación en el bolsillo. Caso ETA, por ejemplo. O, si todavía es temprano para salir, desde la mismísima cárcel dispondrás de todos los medios materiales y humanos para poder seguir dirigiendo la organización, caso GRAPO, sin que funcionarios y policía de guardia puedan impedirlo. Si presides una organización criminal islámica y unos jueces inocentones te echaron veinte años, otros jueces menos inocentones y más subordinados al poder político te perdonarán la mitad de la condena porque es que los legionarios de Mahoma asustan que no veas con esas barbas, esas catanas y ese fanatismo aguardentoso, aunque presumiblemente nunca beban alcohol.


Vaya por dios, se me olvidaba que si estás en tu casa mirando el Gran Fulano y una pandilla de mercenarios extranjeros o un despistado caco entra y quiere tu cabeza y tu cartera, deberás ofrecerle el pescuezo en sacrificio solidario porque tú no tienes derecho a la legítima defensa, aunque sea en tu propio dormitorio. No se te ocurra hacer un arañazo a algún visitante inoportuno porque se te caerá el pelo y te quedarás calvo. Y si sales incólume del asunto y un mal día –un suponé- ves a una ancianita gritando porque un chavea le está robando el bolso y el infarto de miocardio, tú quieto parao, que como es un menor no es responsable de nada. Silba, que es bueno para la salud física y mental.


En fin. Si no eres un cerdo de esos que se mean juvenilmente en la calle o pinta todo un vagón de metro, con público dentro y se va de la estación tranquilo y entre aplausos; si no eres un chorizo de alta o baja estofa; si no eres un criminal que defiende sus ideas y mata al prójimo por intereses étnico-políticos; si no eres nada de eso, si no un pobre desgraciao que se gana el sueldo mínimo con el sudor de tu frente durante diez horas al día, agárrate entonces los machos que vienen curvas. Lo llevas claro, Macgregor. Mejor que te vayas acostumbrando al olor a estiércol, porque esto no se queda así: se hincha. Y es que ya sabes que la basura es un buen abono en el que chapotean felizmente cerdos y chorizos al unísono. Gentuza que chapotea en esta enorme pocilga que nos rodea y donde la gente del montón hacemos de bellotas.


PD: La última noticia, cuando subía el post. “Una jueza no cree estafa pagar en internet con una tarjeta ajena. Absuelve a dos acusados de comprar un aparato de DVD con la tarjeta robada a un tercero porque cree que el perjuicio fue causado por el exceso de confianza del vendedor”. La culpa, del tendero. Los chorizos a la calle y con toda una carrera universitaria por delante: robar todas las tarjetas que puedan e inflarse a comprar chucherías con el plástico ajeno. Aquí está empezando a hacer falta un clérigo de esos de Mahoma a ver si mete en cintura a más de uno y una.

viernes, 10 de febrero de 2006

QUÉ TRABAJO MÁS CANSAO EL DEL SEÑÓ DIPUTAO



“Pasó la época de los grandes oradores, pasó la época de los buenos discursos, pasó la época de los debates inteligentes y llegó el diputado biónico, un tipo encargado de pulsar el botón que diga el grupo parlamentario en el momento oportuno, el resto del tiempo lo puede utilizar en descansar su mente y evadirse de la política mezquina”. (Rafael E. Simancas, en el diario EL MUNDO de 10-02-06)


Los padres y madres de la patria realizan el trabajo más descansado que existe y aunque no ganan gran cosa en comparación con sus homónimos europeos, ciertamente que –dado lo poco que hacen- van bien despachados. Muchos de ellos son unos auténticos desconocidos por el personal de a pie del país. Ni siquiera saben su nombre en su circunscripción electoral. Muchos son puestos en las listas electorales porque son amigos o conocidos de los jefes, de esos cuatro gatos que son siempre los que salen en las afotos y en los telediarios. El diputado anónimo abunda cantidubi (y el senador missing, no digamos).


Por supuesto que deben trabajar un montón, pero no se les nota. Viajarán mucho, tendrán abundantes reuniones con la gente que manda en el partido y en el escalafón habrá debajo de ellos una patulea de serviciales a los que mandar a por café. Pero para lo que realmente se les elige dentro de las listas de un partido en unas elecciones cuatrianuales, esto es, para representar a toda la población y dar cuentas a ella de lo que hacen, para eso parece que no les eligieron. ¿Cuántos diputados se echan a las calles de la provincia por la que iban en las listas, para explicar a la gente qué están haciendo, qué votan, porqué hacen esto o aquello, qué es del programa electoral bajo cuyo paraguas se presentaron? Ni reuniones con las principales asociaciones de vecinos, oenegés, sindicatos, cofradías, sectores educativos o grupos de renombre de su circunscripción electoral. Pa qué. Al fin y al cabo, ellos sólo tienen que dar cuentas a quienes les eligieron y cobijaron bajo unas siglas, que son las que al final dan o quitan votos. A esos jefes son a quienes deben las habichuelas que se comen en la actualidad.


¿Cómo es posible que mucha gente conozcamos el nombre del barrendero que quita la basura de nuestra calle, o el del panadero que nos fabrica el manduco o el del señor del kiosko que nos trae las noticias calentitas en su tinta de periódico, y en cambio, no tengamos ni pajolera idea de cómo se llaman quienes nos representan en el Parlamento democrático? ¿Qué hacen estos padres y madres de la patria y de la provincia que no sólo no logran interesarnos por lo que hacen -¿pero hacen algo, aparte de simplemente votar lo que les dicen?- si no que tampoco hacen esfuerzo alguno porque los conozcamos mínimamente?


El jueves día 9 se volvió a repetir una jugada que de vez en cuando les pasa a todos estos prohombres y promujeres pseudodesconocidos/as, excepto los cuatro que cortan el bacalao. Ante un decreto ley del gobierno zapateril por el que se iban a subir los impuestos sobre el tabaco, 30 socialistas votaron en contra (incluyendo a un ministro y una gran jerifalta) porque no se enteraron bien de qué había que votar. Y es que “la encargada de indicar a sus compañeros de partido el sentido en el que debían votar –con un gesto de su mano levantada-, se equivocó: primero hizo la señal convenida para que votaran NO al decreto del Gobierno e inmediatamente se dio cuenta de su error y cambió la señal para el SI, pero ya era tarde”. (EL MUNDO).


Antes de la votación, los unos estarían durmiendo, otros leyendo y los más contando las telarañas del techo. Cabe imaginar que no sólo no se habían leído previamente el decreto si no que ni siquiera les habían pasado el texto sus amables jefes. Para qué tanto esfuerzo si basta con levantar una manecita y decirles que aprieten un botón que dice SI o uno que dice NO. A esto se le llama tener “obediencia de partido”, o sea, espíritu crítico, inquietud, ganas de aprender, cumplimiento laboral y otras gaitas. Después pasa lo que pasa, que salen leyes infumables por las que el personal se pregunta:


-¿Pero están locos estos romanos?


Basta que lo estén, aunque sea temporalmente, sus tres o cuatro capataces para que el invento salga en el BOE y en donde haga falta, aunque luego cause la hilaridad o el estupor a cualquier hijo de vecino sensato. Ese es el caso, por ejemplo, de esa ley que ahora intentan aplicar a los principales matarifes de ETA que andan en la cárcel, como un tal Parot, con más de 80 muertos a sus espaldas, condenado a más de mil años pero que a los veinte puede salir a la calle por una interpretación clemente e interesada del Gobierno. “Es la ley”, se dice. Lo que no dicen los “muy-muy” es que quienes hicieron y , sobre todo, quienes aprobaron masivamente esa ley estaban tocando el violón cuando llegó la hora de votar.


-Chico, ¿qué toca ahora votar?


-Una ley que va a meter a los etarras en la cárcel hasta que nos salga de las narices y de nuestras conveniencias políticas. No me la he leído porque ni siquiera nos la han dado. Para qué si, opine lo que opine, debemos votar lo que nos digan nuestros dirigentes máximos del partido. A nosotros no nos pagan por pensar si no por votar lo que diga el mando.


Y así salió el engendro. Así sale muchos días del año, con equivocaciones o sin ellas. Y así nos luce el pelo. A nosotros, claro. A ellos les va divinamente.

martes, 7 de febrero de 2006

LA OPA QUE NOS TOMA POR TONTOS



El 7 de septiembre titulábamos por estos pagos “El sopapo del gas” al referirnos a la OPA que Gas Natural, capitaneada por la Caixa (algo más que una Caja de Ahorros), presentaba contra Endesa para merendársela con patatas y hacernos a muchos consumidores la mar de felices al ver reducida la competencia donde elegir, con el riesgo consiguiente de tener que pagar más ante el nuevo monopolio eléctrico-gasístico que se está preparando alevosamente.


Escribía por aquel entonces que “ los tíos que se dedican a estas cosas, que se creen que el personal de a pie es imbécil, se han descolgado con que encima hacen mal negocio o que todo quedará igual”. Han pasado unos cuantos meses y la gestación del asunto va viento en popa pues cualquiera que tenga dos dedos de frente sabe que un pez chico (Gas Natural) se come a uno grande (Endesa) sólo si andan por en medio los cuatreros de la política imponiendo la ley por las bravas. Y en esas estamos. Ya el Gobierno, al mando del sheriff Zapatero, ha dado el visto bueno a la merendola poniendo solamente como condiciones al pezquenín que use pan integral, que tiene mucha fibra y hace más digerible el bocao del pez grandote.


Particularmente me traería al pairo el opazo si no fuese porque, con sus argumentos torticeros, nos toman por idiotas a la mayoría de los consumidores y porque peligra mi bolsillo. Me importa tres pimientos que una empresa sea catalana y otra radique en Madrid pues el capital no tiene más carné de identidad que el trinque y el mamoneo. Es más, contaré mi caso particular como prueba de que lo que me preocupa del peliculón es que al final de este descaro financiero mi bolsillo va a sufrir un serio ataque económico así como que mi libertad de elegir se va a ir al carajo.


Tengo el gas contratado a Gas Natural y la electricidad a Endesa. Y vamos tirando. Tanto una como otra compañía me tienen hasta los cataplines con sus repetidos intentos de que me pase a ellos. Se trata de que el gas y la electricidad me los suministre la misma empresa, llevándose ésta el negocio y la otra quedándose a dos velas. Unos y otros me ponen de señuelo algunos descuentos y rebajas en el recibo del mes, pero yo los estoy mandando a freír espárragos cada vez que me dan la paliza con el tema. ¿Por qué, pensará el amable lector, si parece que optando por tener el gas y la electricidad en la misma compañía, pagaré menos por ello? Pues por la sencilla razón de que aborrezco los monopolios ya que en sus manos no tienes posibilidad de elección alguna. Sólo queda tragar y aguantar sus abusivos precios. Y si te cabreas por un mal servicio o abuso, ¿qué demonios haces?, ¿a qué otra empresa acudes? Así que prefiero tener repartido el suministro de gas y electricidad de manera que si alguna vez se me inflan las narices por el pésimo servicio o cualquier milonga, pueda irme a la compañía de enfrente.


Pues bien, esta actitud personal tan enraizada en mi desconfianza y repelús hacia los monopolios, se va a ir al garete porque a Zapatero y sus correveidiles les gusta más Gas Natural y la Caixa por las razones que sean, que todos sabemos cuales son. Y, claro, quieren quitar de en medio a la competencia. Así que cuando el Opazo contra Endesa salga adelante, al Puñetas le harán la puñeta pues ya sólo tendrá un único suministrador de gas y electricidad: Gas Natural, o sea, la Caixa, es decir, la madre que los parió. En vez de abrir el abanico a más suministradores, estos socialistos lo van a cerrar a uno sólo. “Cataluña, Andalucía, Aragón y Extremadura tendrán un solo distribuidor de luz y gas”, leo apesadumbrado en los periódicos. Incluso aunque al final no hubiese absorción sino ayuntamiento placentero entre ambas compañías, mi dolor de muelas como consumidor (el único derecho cívico y social que me va quedando) sería exactamente el mismo. Me horroriza está inerme, cautivo y desarmado ante una compañía que ejerce vilmente el monopolio.


Bien, pues esta situación monopolística y de abuso del mercado (lo uno va implícito con los otro) dice el gobierno del zapatazo y todos sus meapilas que “favorece la competencia”. Hoy mismo ha farfullado el ministro de Industria, Turismo, Comercio y Chanchullos, el impresentable Montilla Moriles, que “la OPA sobre Endesa es una apuesta por el futuro”, que “mejorará la competencia en nuestro país” y que “creará un mayor equilibrio que redundará en una mayor estabilidad del sistema como consecuencia de la gestión de varias fuentes energéticas”. Yo, ni harto de vino, sería capaz de decir semejantes estupideces. Pero claro, el Puñetas no es ministro ni tiene el morrazo de Montilla Moriles. Así que si el camarada piensa que algunos somos imbéciles, habrá que devolverle la viceversa. Sin acritud, con mucho respeto y mucha coña marinera. Que aquí, a diferencia del amigo, somos más educados que todo el Consejo de Ministros en pleno, que el Tribunal de Defensa de la Incompetencia y que el Comité Nacional de la Energía del futuro Monopolio. Menos rollo patatero (o zapatero, mejor dicho) y más vergüenza y respeto hacia el prójimo, que eso de querer engañarle con cuatro paparruchadas está muy feo. Si les encanta tomar el pelo al personal de a pie, que pongan una peluquería. Visto lo bien que se les da, les auguro un enorme futuro: se forrarán.

viernes, 3 de febrero de 2006

ESTAMOS ZUMBAOS



Hoy estoy de lo más optimista. Acabo de repasar los periódicos atrasados (aún sin leer) de las dos últimas semanas, pues el tiempo vuela y en un santiamén te desaparecen las horas como si te las robara un delincuente de guante blanco: sin darte cuenta.


No hay nada peor que hacer un recorrido sistemático e “histórico” por los últimos quince días para comprobar que por mucho optimismo y morro que le echemos al asunto, nuestro mundo (el más cercano y el más lejano) está como un cencerro. La otra posibilidad es que el loco sea el escribano, cosa tampoco desdeñable. Pero como los defectos siempre los tienen los demás, seamos como las gallinas y vayamos al grano.


“Los colegios empiezan a requisar móviles a niños de sólo 5 años”. Lo que abría que requisar es el cerebro de sus padres y mandarlo a una planta de reciclaje.


“El Partido Andalucista pedirá a la Junta de Andalucía que elimine de la cafetería de los institutos todos los alimentos que tienen un alto contenido en grasas –bollería industrial- y las bebidas enriquecidas con azúcares”. Para grasas y michelines, los del Partido Andalucista. Los cuatro gatos que lo componen están comiendo a dos carrillos del presupuesto público y sus digestiones son bastante pesadas. ¡Menos gastronomía en boca ajena y más dieta política en la propia!


“En Brasil se pone de moda abandonar bebés”. ¡La madre que los parió!


“Nuestros diputados son de los más pobres de Europa”. Los más pobres de ideas, claro. Con obedecer al jefe y apretar el botón del escaño en las votaciones ya tienen ganado el sueldo.


“Nunca había bajado tanto el paquete de Ducados: ahora mismo me voy a comprar un paquete entero”. (Fumadora de Ducados al diario “Qué”). Rebajas. Grandes rebajas. La muerte también hace rebajas.


“Los Grandes Hermanos son más listos que la media”. ¡Dios mío, qué coeficiente mental tendrá la media!


“Descubrimiento científico: La pasión amorosa tan sólo dura dos años”. ¿Tan sólo? ¡Yo pensé que sólo duraba cinco minutos!


“El PSOE andaluz apela al derecho de familiares socialistas a hacer negocio con la Junta de Andalucía”. Yo me lo guiso, yo me lo como. Y es que familia que trinca unida, permanece unida. Llevan más de 25 años en el poder andaluz y ni uno sólo de sus jerifaltes, de cabo para arriba, ha dimitido jamás. ¿Quién dijo que la familia está en crisis?


“Una juez rechaza internar a una anoréxica porque la ve capacitada”. Sí, capacitada para seguir muriéndose de hambre.


“Esclarecen un crimen de hace 30 años, pero el asesino no puede ser detenido porque el delito ha prescrito”. Yo pensé que era porque la asesinada ha resucitado, pero se ve que los asesinatos –como el yogur- tienen fecha de caducidad.


“Policía especialista en violencia doméstica mata a tiros a su novia en Ronda y se suicida”. A veces predicar con el ejemplo no es nada aconsejable.


En este enorme psiquiátrico que es el planeta Tierra, loqueros y pacientes, andamos todos con las neuronas de capa caída. Y ahora, con su permiso, voy a abrir la puerta. Acaban de llamar y me temo que vienen a ponerme la camisa de fuerza. Ya no quedamos ninguno cuerdo.