viernes, 29 de octubre de 2004

EL LOCO SOY YO

Hay cosas que difícilmente me resultan comprensibles utilizando las vías de la razón y el sentido común. Cierto es que dichas vías sirven para poco en el mundo que hemos fabricado los humanoides tan torpemente desde hace ya unos cuantos siglos, pero uno estudió hace ya sus añitos aquello tan bonito del racionalismo, la ilustración, el homo sapiens y otras zarandajas peliculeras, pensando que había algo de verdad en ello. ¡Quiá! De razón, poca; de ilustración, cada vez menos y de sabiduría, je, je, ya no queda un sabio vivo. Los que había, o los matamos o se suicidaron antes de que les diésemos el pasaporte.

A veces, cuando situaciones extremas como una guerra, un vacío de poder o una catástrofe, los más tontos y bordes de la creación (los bichejos humanos) sacamos toda la porquería que llevamos reprimida adentro y armamos la de dios. Puede ser justificable. Pero es cuando estamos en presunta paz, armonía y tranquilidad social y personal cuando se demuestra que no andamos muy bien en nuestras cabales. Y si no, he aquí dos casos que vienen en la prensa de hoy mismo:

** La venta de tabaco crece pese al alza del precio y las campañas preventivas”. Sólo en la provincia de Málaga se vendieron el año pasado ¡¡17 millones de cajetillas más que en 2002!! Y eso que en un año el precio medio del tabaco experimentó un aumento del 9,7 %. Pues bueno, pues vale. Todo el mundo, y también las personas adictas al tabaco, acepta que fumar es perjudicial y que repercute en sus bolsillos, pero el personal es incapaz de dejarlo. “Es malo, pero no lo dejas hasta verle las orejas al lobo”. O sea, que somos como las ovejas. Y la gente, los compradores y fumadores, opina la mar de inteligentemente: “El Gobierno debería hacer otro tipo de campañas para que la gente dejara de fumar”. (¿Meterla en la cárcel o encerrarla en un manicomio?). “La gente no dejará el tabaco hasta que no vea que es un problema de salud pública”. (Y ahora mismito, ¿qué es? ¿Una coña marinera?). “Muchas personas dejarían el tabaco si fuese más complicado comprarlo”. (Si lo vendieran sólo en Brasil, ¿no?). Y mientras que el cacao diarreico-mental fluye como la lava por las requemadas mentes de los fumadores, los estanqueros –los que venden la nicotina- argumentan que subir el precio sólo favorece al contrabando. ¡Pues que lo regalen, oiga! Para más inri, al menos en la Costa del Sol, las ventas aumentan también gracias a los ingleses, que llevan tabaco a su país, pues les dejan introducir en la aduana hasta 52 cartones de tabaco por persona. Y, por si fuera poco, algunos fumadores han comenzado a consumir marcas de tabaco más baratas y desconocidas para ahorrar algo de dinero. A saber qué demonios se meterán ahora entre garganta y nariz. Total, una comedia de enredo que a este paso nunca tendrá fin, con lo elemental que parece el desenlace. Vamos, digo yo.

** Leo en la página de la BBC en la interné que en Francia han autorizado el bloqueo de los teléfonos móviles en los sitios públicos, sobre todo, en el cine. Resulta que cuando los franchutes van al cine se dejan encendido el teléfono de las orejas con el incordio que ello representa para los espectadores. Ni anuncios, ni carteles avisando de que los apaguen, ni aviso de multas. El homínido humano, sea francés, español, inglés o de la China es incapaz de tener apagado el móvil. ¿Será un problema de soledad, de falta de memoria, de desvergüenza, de rebelión cívica, de estupidez congénita…? Más no es Francia el primer país que adopta la medida del bloqueo de la señal del celular en los cines, teatros y otros lugares similares. Ya antes pasaron por el mismo trago Japón o Israel. Y cuando aún no se había inventado el móvil, ¿qué hacían estos adictos movileros? ¿Se mordían las uñas, cazaban gambusinos, violaban ancianitas o se pasaban todo el día masturbándose?

Hay que tomarse las cosas de la especie humana con buen humor. Con tan buen humor como que este Juan Puñetas no ha probado en su vida una calada de un cigarro ni ha usado el teléfono móvil más allá de 30 veces en 8 años de tenerlo. O sea que, viendo el panorama que me circunda, el loco y el zumbado soy yo. Lo único que tiene de bueno el serlo es que me sale bastante barata la cosa. Como dice mi abuelo: “estarás mochales, Puñetas, pero de tonto no tienes un pelo”.

miércoles, 27 de octubre de 2004

PARADOJAS DE LA ACTUALIDAD

** Ya es curioso que cuando en España hay numerosos sectores (entre ecologistas, nacionalistas y trapisondistas que se las dan de progres) que demonizan las corridas de toros, olvidando que si no hubiera corridas la raza del toro bravo sólo quedaría para los museos, en Shangai, allá por la China, acaban de celebrarse por primera vez dos corridas taurinas. La cosa fue como en España, excepto que al final los toros se fueron de la plaza con vida. Cuentan las crónicas que aquello fue un espectáculo poco serio (comparado con la solemnidad de las corridas que se celebran en España), pero ya es chocante que lo que algunos quieren censurar en nuestro país, sea alabado y celebrado en otros tan en las antípodas culturales como lo es la China mandarina.

** Se comenta por todas partes que el idioma español está creciendo en todo el mundo, que es el segundo más hablado en los USA y que en multitud de países (desde Brasil a Inglaterra) mucha gente se pirra por aprenderlo. Mientras tanto, en España, al igual que sucede con las corridas de toros, el español está en retroceso en algunas partes de su territorio (País Vasco, Cataluña, Galicia…) pues para algunos paisanos de boina y barretina, dicho idioma no es el suyo. Incluso los más lanzados y esperpénticos prefieren el inglés al castellano como segundo idioma. Que San Cucufato les conserve la vista…y la lengua. Ah, y su visión de futuro.

** Según el informe Planeta Vivo de WWF/Adena los españoles y medio mundo estamos endeudados hasta las orejas en el gasto de los recursos naturales. Dicho en plata: los españoles gastamos tanto que necesitaríamos tres países como el nuestro para satisfacer esa demanda. Y eso que ocupamos el puesto 22 en el listado mundial. El consumo de energía ha subido un 700 % en las últimas cuatro décadas y de seguir así, allá por el 2050 harían falta 40 planetas para satisfacer la demanda de los terrícolas. Lo paradójico es que seguimos sordos y ciegos ante el asunto y no aplicamos soluciones. Pero claro, a ver quien es el guapo que autolimita su consumo, llámese EEUU, España, Pierre Macramé o Juan Puñetas.

** Hace ya unos años que el consumo de televisión por parte de los niños es muy superior respecto al tiempo en que los tiernos infantes permanecen en las aulas escolares, en las que encima la mitad del mismo se lo pasan aprendiendo banalidades. Pues bien, pese a ello, en España los programas televisivos de carácter infantil brillan por su ausencia en las programaciones de las mayorías de las cadenas, para las cuales lo único que aún sigue siendo considerado típico de la niñez son los dibujitos animados. Para todo lo demás, los chavales son considerados tontos, ignorantes o simplemente subnormales. Incluso, no existen. En sentido contrario, cada vez se echa en las espaldas de las escuelas el que intenten resolver los grandes problemas sociales, mediante la información y la concienciación a los chaveas: prevención del sida, igualdad de sexos, educación vial, evitación de posturas racistas y xenófobas, multiculturalidad, no violencia y tantas y tantas cuestiones que hacen la lista eterna. ¿Alguien entiende esta sobredimensionada exigencia hacia la escuela frente a la nula aportación y colaboración televisual, cuando el tiempo y la ascendencia en el aprendizaje de los chicos se ha trasladado exageradamente del medio colegial hacia la pequeña pantalla?

** No hace mucho, se hicieron muy populares unas imágenes en las que el seleccionador de fútbol español, Luis Aragonés, hacía el indio gritando en un entrenamiento al jugador Reyes algo así como “dígale al negro que usted es mejor”, en alusión a Henry, compañero de equipo del jugador sevillano. Bueno, pues parecía que ya todo estaba zanjado y que el asuntillo había sido una chochez de Luis, cuando hace unos días el Partido Nacionalista Vasco realiza una pregunta parlamentaria al Gobierno para saber si va a adoptar alguna medida por las palabras de Luis. Qué paradoja de las paradojas. El Partido que defiende secularmente tesis etnicistas (la raza vasca, el RH y otras majaderías) y que tiene como glorioso fundador a un tal Sabino Arana que era racista hasta la médula como atestiguan sus propias manifestaciones y escritos, resulta que se entretiene en exigir medidas contra el seleccionador español, acusándolo de racista. Algunos es que o no se enteran o es que saben hacerse el tonto de maravilla. O las dos cosas…

lunes, 25 de octubre de 2004

EL PUTO COCHE

La guerra de todos los días.

Ayer llovía un poco en Madrid. Se cuadruplicaron los accidentes de tráfico. Por Almería se echó un poco de niebla en la autovía y, cataplof, choque en cadena entre casi 20 coches y un par de muertos. Por otras Comunidades la cosa no fue mejor. Muchos emplean aquí la infantil y pueril justificación del mal tiempo. Pero cuando hace un sol de justicia y el azul del cielo se distingue a la perfección, también la gente se sigue matando con el puto coche. (Algunos lo achacan al exceso de calor, claro). Paparruchas.

Mientras que cualquier guerrita, incluida la ya empalagosa de Irak, produce unas cuantas decenas de muertos diarios gracias al uso de los sofisticados tanques, bombas, misiles y demás parafernalia bélica, con el pacífico coche entre las manos, miles y miles de conductores (más los peatones que se llevan por delante), mueren a la mayor gloria del progreso, la paz, la estupidez y el mercado. Nunca negocio tan redondo como el automovilístico movió tanto la idiocia del ser humano. Las consecuencias: sólo en Europa hay 40.000 muertos al año y más de un millón y medio de heridos gracias a la Renault, Opel, Audi, Ford y restantes marcas automovilísticas. Empresas que dan de comer a muchísimas gente, pero sobre todo a las funerarias y a los sepultureros. Inicialmente la culpa de tanto accidente es de los que conducen; detrás de ellos caminan los inútiles y acomodaticios politiquillos que pasan olímpicamente del tema; y cerrando filas también les corresponde su parte alícuota de irresponsabilidad a las citadas Empresas que poco aportan a la solución del problema, por mucha propaganda y adelantos técnicos que le echen al asunto.

En Europa, 40.000 muertos al año. Y sólo cuentan los que fallecen los primeros días. Pero es que en China, donde el coche está empezando a despegar, cada día mueren 600 personas en accidentes de tráfico, lo que hará un cómputo anual de unos 220.000 fiambres. ¿Cuántas guerras de Irak caben en estas cifras? ¿Cuántas guerras mundiales? Pues oiga, como el que oye llover.

Ahora en España se va a implantar el carné de puntos para intentar aminorar los más de 4.000 muertos y 150.000 heridos anuales. Cada trastada que hagas, puntos menos y al final tendrás que volver a pasar por la autoescuela. Pamplinas. Cagarrutillas insignificantes que –con suerte- sólo bajarán la mortalidad un 10 %. Tantos siglos de evolución genética e histórica para acabar al final con menos seso que el hombre de Neandertal. Antes el personal se moría o mataba por comer, por salir de la miseria, por la represión de los poderosos, por enfermedades…. Ahora la mayoría la espicha metido en un cuatro-latas que corre sin necesidad a 200 por hora, que toma una curva al doble de la velocidad permitida o que se va al terraplén gracias al despiste con el cigarro, el móvil o la tecla del CD. Una de las muertes más estúpidas y absurdas que recuerdan los tiempos. Pero no aprendemos.

Todavía recuerdo mi primer cochecillo, un vulgar Seat 127, hace ya más de 20 años. Sólo tenía 45 caballos y cogía perfectamente los 140 kilómetros por hora, aunque cuando alguna vez hice esta majadería, aquello parecía una cafetera. No tenía el potente caballaje de los coches de ahora, ni los neumáticos sin cámara que tantos reventones evitan, ni poseía ABS, ESP o airbag, ni dirección asistida, ni navegador, ni reposacabezas de seguridad, ni asientos anatómicos, ni cristales a prueba de golpes ni tantas pijadas de “seguridad” como llevan los coches de hoy día. Tampoco las carreteras de entonces tenían nada que ver en seguridad y comodidad con las autovías y autopistas de ahora. Pero una cosa aseguro: con mi seillas nunca tuve miedo en una carretera y eso que me recorrí media España con él. Hoy, con un coche mil veces más “seguro”, cada vez que salgo de la puerta del garaje es que me voy cagando las patas abajo ante la que me espera en las calles y carreteras.

Así que no me hablen de guerras, ni de terrorismo ni de violencia. Ya tenemos bastante con el tráfico rodado y los millones de potenciales delincuentes que circulan con un volante entre las manos. Todos serán unas bellísimas personas en su casa y en la cama (como este menda), pero es montarse en un trasto rodante y se transforman de un modo alarmante en unos energúmenos con ojos. Ni los profesionales del volante se salvan. Ante eso, o hay mano dura o a la larga aquí no quedará vivo ni el apuntador. Que es lo que nos merecemos.

viernes, 22 de octubre de 2004

DIARIO DE UN ESCOLAR AJETREADO

La cosa empieza allá por las 7 y media de la mañana, cuando los papis depositan al chavea en las puertas de la escuela, camino del trabajo donde deberán ganarse decentemente el pan, el DVD y las llamadas del móvil. En muchas escuelas actuales acá por Andalucía, algunos alumnos entran a las 7,30 de la mañana porque alguien tiene que encargarse de los chaveas a esas horas tempraneras, en ausencia de los papuchis. Y ese alguien tiene que ser la escuela, claro, que está para eso, para resolver todos los problemas del mundo mundial, no sólo para enseñarlos. En la guardería (perdón, cole) desayunan y se entretienen hasta que llegan los profes que se dedican a intentar instruir curricularmente mate, lengua y esas cosas tan antiguas.

Cuando acaba la faena de las asignaturas y todo el mundo está con ganas de cambiar el tercio de varas, una gran mayoría de mozuelos y mozuelas deben quedarse en el cole a comer, porque sus papis siguen trabajando o les pilla demasiado lejos el hogar para venir, hacer un cocido de garbanzos en el microondas y regresar de nuevo al tajo. Así que bastantes mocosos van ya por las 8 horas de permanencia en el colegio cuando acaban de deglutir como los pavos la comida industrializada que trajo el catering correspondiente. Algunos reanudarán las clases nuevamente, aunque el sueño y el aburrimiento apenas les permitirá abrir los ojos. Los críos más suertudos, aquellos en que su cole es de jornada continuada, podrán irse a casita, que ya es hora. A pesar de ello, otros muchos todavía tendrán por delante un par de horitas de actividades extraescolares en el recinto escolar dándole al judo, el baloncesto, la informática y demás entretenimientos virtuales. ¡Educación integral, muchachos, que ya la exigía Bakunin y Carlitos Marx hace una espuerta de años!

Allá por las 18 o las 19 horas, cuando el sol está a punto de irse a hacer gárgaras, los papaítos se acuerdan de que tienen que acercarse al cole a recoger al hijito de su alma, quien encima todavía es capaz de reconocerlos. (La naturaleza, que es muy sabia). ¡Papuchis!, grita el barandilla. Casi 12 horas lleva metido entre los muros escolares. Y encima más contento que unas castañuelas. Todavía si los progrenitores tienen programada una hora de asueto para ir de compras o echar un polvete sin que nadie les moleste, enviarán al niño a la academia particular de guitarra y mecanografía durante una horita, para que siga completando su formación. Por fin, con el regreso al dulce y extraño hogar, habrá de ponerse a hacer los deberes escolares, luego ducharse y finalmente hincarle el diente a un filete empanado de vaca, eso sí, precocinado, que el tiempo aprieta y ahoga. Luego, unos minutos de televisión que podrán prolongarse hasta altas horas de la noche si los papuchis no tienen prisa (los españoles es que nos acostamos muy tarde) y porque al nene no hay que llevarle la contraria ya que lo mismo se estresa, se cabrea o se deprime y porque, angelico, también tiene derecho a descansar de la dura jornada, que no todo va a ser aprender y aprender para ser un don nadie el día de mañana. Así que el riquitín se zampa toda la telebasura que le cae y cuando ya no puede con ella se va al catre pues a las 7 de la mañana el despertador volverá a cantar inmisericordemente el buenos días, levántate capullito, que es hora de ir al cole a desayunar, comer, hacer judo y si se tercia, a escuchar un fragmento inconcluso de mate o inglés.

-¡Que duermas con los angelitos! – le besan amorosos sus progenitores.

Y el nene entorna los ojos con ganas de no volver a abrirlos nunca más. Eso sí, la administración, con alta sensibilidad social, le pagó el aula matinal, los libros de mate y lengua así como una parte del gasto del comedor y de las actividades extraescolares. ¡Después no dirán los papás que les salgo caro! Y los padres tan contentos, oyes: a caballo regalado, ya se sabe, no le mires el diente. Y mirando al peque piensan agradecidos que el descanso no veas lo que reconforta. Quiero decir, el descanso de no ver al enano más que a la hora de cenar y dormir. Y menos mal, porque cuando sea mayor y se compre una moto, entonces es que ya no le veremos ni el pelo.

Y colorín colorado este ajetreado cuento escolar se ha acabado.

miércoles, 20 de octubre de 2004

MEAPILAS DE IZQUIERDAS

Llámase meapilas a las personas excesivamente religiosas y beatas. Es un término despectivo que se aplica a la gente tan preocupada por cumplir con la conducta “correcta” que impone la madre Iglesia, tan embebida de su agua bendita, que hasta la mea.

Dado que el exceso de religiosidad ha ido disminuyendo con los años (salvo cuando llegan tiempos de negrura o el destino se pone tonto, en cuyo caso la inmensa mayoría se agarra al clavo ardiendo de la religión por si hay suertecilla…), hoy día es más difícil encontrar un meapilas cien por cien auténtico que un conductor que cumpla con todas las normas de tráfico.

Sin embargo, observo que la miopilez todavía conserva amplia y sólida base en el mundo de la política, de la economía y de todas esas ramas del “desconocimiento” que están siempre cerquita del poder establecido. En España son archifamosos los meapilas del PNV (Partido Nacionalista Vasco), que siempre están poniendo una vela al dios vasco y otra al diablo etarra. Por eso no se fía de ellos ni su padre. También son bastante meapileros los nacionalistas catalanes de derechas (CiU), a consecuencia del numeroso grupo de genes religiosos y bancarios que portan en el cerebro y la cartera. De los alegres chicos y chicas del Partido Popular, el vaticano de la derecha española, sólo decir que en las comidas la mayoría bebe agua bendita en vez de mineral o del grifo. O sea, que todos irán al cielo a aburrirse.

Pero, ¿y en los partidos, partidillos y partiduchos que se autoproclaman alegremente de izquierdas? Mientras que están en la oposición comiéndose los nudillos, se les nota la mar de plurales, talentosos y comprensivos. Pero en cuanto arañan el voto a unos cuantos desmemoriados y empiezan a rascar bola y euros para el bolsillo, pronto se les empieza a notar aquello de “donde dije digo ahora digo Diego”, “más vale pájaro en mano que ciento volando” y “si te vi no me acuerdo”. El refranero español es una mina a la hora de catalogar a estos especímenes del progreso. Perdón, del auto-progreso.

De modo que ahora, como felizmente gobierna la izquierda (admitamos esta entelequia para así no volvernos locos), están brotando como setas los meapilas escondidos en tiempos de penuria y oposición. Naturalmente que la meapilez de éstos no cubre el abanico pseudo religioso de los meapilas de derechas (habituales comensales del poder), sino que gira más bien sobre otros valores también eternos en la teoría, pero igual de discutibles y vacíos en su práctica como son la igualdad, la solidaridad, el bien común, lo público, ecétera. (Sabemos desde que el mundo empezó a leer libros que media humanidad ha matado o maltratado a la otra media en nombre de Dios, del Estado o de las bellas palabras impuestas a golpe de guillotina, bombazo o pelotón de fusilamiento. O sea que, menos lobos).

Así que ahora andamos por el suelo hispánico, prehispánico o lo que sea, embadurnados en la sana y laica beatería de los meapilas auto-confesados de izquierdas. Y no pasan ni una, oiga. Del escudo de Aragón, que lleva la tira de siglos sin que nadie haya caído en semejante detalle, se quitarán las cuatro cabezas cortadas de unos tipos que parecen moros para no molestar a los que ven ahora visiones. Las corridas de toros deberán prohibirse en las televisiones o llevarse a los horarios en que duermen hasta las hormigas, porque son un espectáculo violento que agrede a los niños de pecho. Es deleznable que en un partido de tenis recojan las pelotas unas chicas de esas que desfilan por las pasarelas (modelos les llaman, aunque no sé en qué son modélicas), porque nuestros meapilas progres consideran que es un atentado contra la imagen moderna de la mujer. Cuando se escribe hay que utilizar los dos sexos gramaticales para evitar el machismo, con lo cual el/la escritor/a acaba hasta los güevos/as de poner barras/os y convierte la cosa/el coso en un guirigay del paraguay.

Hay muchos ejemplos de meapilez (y no veas los que están por venir…) pero se me acaba el tiempo ya que aprietan las ganas de hincarle el diente a una tortilla de patatas “plural” (antes, llamada “española”) que me espera en la cocina. Arrivederchi y que me aproveche.

lunes, 18 de octubre de 2004

DE CUBA TE ECHAN Y EN ESPAÑA, ENCIMA, TE PUTEAN

¡Cómo me gustaría que este puñetero país en el que vivo fuese un lugar pacífico, normal, gris, anodino, tranquilo…! Ya que todos los problemas se quieren resolver endilgándoselos a las escuelas (de eso hablaremos un día de éstos), no estaría mal que se impusiese como asignatura obligatoria en todo el sistema educativo la práctica del yoga y la relajación. A ver si así conseguíamos que las futuras generaciones sean más libres, vivan más pendientes de la vida que del reloj, consuman menos telecaca y aborrezcan a tanto mercachifle dirigente como venimos padeciendo desde hace ya una reata de siglos.

Tenemos un ejemplo reciente bien ilustrativo. Resulta que un diputado de la derecha del PP ha ido a Cuba por aquello de fastidiar al dinosaurio Castro, anunciando previamente que intentaría hablar con algunos de los pocos opositores que aún no están exiliados o entre rejas. (Puestos a fastidiar, lo suyo hubiera sido no anunciar nada y entrevistarse realmente con quien quisiera, pero se ve que lo que más interesaba al diputado era que Castro supiese a lo que iba. Para que lo echase, se entiende). Así que el viaje ha sido en balde. Vamos, que salió del avión por una puerta y los militares cubanos le volvieron a meter por la otra para que iniciase el regreso en un santiamén, sin derecho ni a bocadillo ni a polvete. Pero junto al diputadín español viajaban dos diputados holandeses, que también fueron devueltos a los corrales de donde procedían. Y ahí es donde se nota el tener un país y un gobierno serio, normal y esas cosas y el pertenecer a un lugarejo algo bananero con un gobierno repleto de zafios e indocumentados.

Mientras que el Gobierno holandés puso el grito en el cielo, convocó inmediatamente al embajador cubano y emitió una nota en la que indicaba claramente que el ministro de exteriores de los Países Bajos y el gobierno estaban indignados por el incidente, el gobiernillo español y el partido que lo sustenta han jurado en arameo contra el diputado del PP echándole la culpa del asunto, catalogándole de “provocador”, de “montar números de circo” y otras lindezas que no reproducimos porque este comentario está autorizado hasta para los lectores menores de edad.

En muchos casos aseguro que pagaría la mitad de mi sueldo por ser holandés unas cuantas horas al día. “El diputado Moragas ha buscado deliberadamente su expulsión de Cuba”. “El PP está organizando con este incidente un circo político para convertir a Moragas en una especie de héroe nacional”. “Es un problema de carácter burocrático, provocado por el político popular, quien debería haber solicitado un visado acorde al carácter político de la visita que iba a realizar a la isla”. Son algunas de las besugadas que se han dicho en España por parte de jefecillos y mamoncetes actualmente en el poder. En Holanda a nadie, ni del gobierno ni de la oposición, se le ha ocurrido ni por asomo decir algunas de estas tonterías. Han hecho lo normal: defender a sus diputados y poner a parir al matarife castrista. Es la diferencia entre un país y otro. Entre el desmadre de aquí y la seriedad y el sentido común de allá. Lo que va de un remedo de país donde la sangre hierve y la mente está recalentada a todas horas por falta de riego sanguíneo (que lo da la cultura y la sensatez) y otro en que parece que por las venas circula horchata y donde pocos sacan los pies del tiesto, salvo en las grandes ocasiones.

Decía Machado aquello tan triste de “españolito que vienes al mundo, te guarde dios, una de las dos Españas ha de helarte el corazón”. Seguimos con la misma cantinela, sea cual sea quien mamonee desde el poder. Y así nos va, bendita Holanda.

viernes, 15 de octubre de 2004

EL VENTILADOR DE ETA

La banda terrorista eta está de capa caída. Cada vez más sus miembros, incluso los que andan por la cúpula, son pillados por la poli y a menudo con las manos en la masa. La última fue a primeros de octubre cuando cayó el que es considerado el gran jefe, un tal Antza que vivía de putísima madre con su mujer e hijos en un señoritil poblado francés y en un fastuoso chalé. El jefe de la banda y la tesorera. Todo quedaba en casa y en la familia. También cayeron otro montón de bandidos colaterales que ahora están empezando a largar por esa boquita “revolucionaria” que tienen. Lo primero es que ellos no han hecho nada o que la culpa es de otros. Y, naturalmente, cuando el barco empieza a hundirse y las ratas son atrapadas por los buenos de la película, entonces empieza el sálvese quien pueda, el compartir miserias. Empieza el “cante”, parlan los acusicas y comienza el ventilador a funcionar. A repartir mierda por doquier, que aquí no vamos a ser sólo nosotros los pringaos, con la de gente que nos apoyó y ayudó en la venturosa causa.

Y en esas empezamos a estar. Los primeros que ya han sido señalados por el ventilador etarra son algunos cocineros vascos de prestigio mundial como Arzak y Subijana. La cosa estriba en que –según los etarras detenidos- los restauradores han pagado el impuesto revolucionario de la banda. Pronto comenzarán a salir más nombres: de periodistas, empresarios, políticos, futbolistas, cantantes y hasta vendedores de fruta.

En toda sociedad en la que hay una dictadura, miedo y extorsión, la bajeza moral de la mayoría de sus habitantes alcanza cotas superiores a lo normal. No lo critico. Simplemente, lo constato. Y en el País Vasco, donde lleva campando el terrorismo etarra más de 30 años, la podredumbre ética es generalizada. Porque allí no sólo ha habido y hay miedo, si no también colaboración en muchos casos, miradas a otra parte, aprovechamiento político de la situación. Muchos han sacado tajada de la hidra etarra. Algunos no sólo el bistec sino la ternera entera. De modo que es presumible que muchos de los ricos, famosos y excelsos personajes de la élite y sociedad vasca hayan tenido que “tragar” con la extorsión de los etarras. Y muchos, ahora que la organización se desmorona, andan con los atributos varoniles o femeniles en la mismísima boca temiendo que sus nombres salgan a la luz en cuanto los valerosos bandidos se dediquen a cantar las veinte en copas a la policía.

Así que está por venir (en cuanto eta agonice definitivamente) la historia final típica de todas las sociedades que durante años sufrieron (y algunas se beneficiaron) del terror, el miedo y la infamia. Dentro de muy poquito veremos cómo en el País Vasco nadie colaboró con eta, todos la combatían, nadie pagó el famoso impuesto revolucionario, nadie se chivó, nadie miró para otro lado ante la barbarie. Dentro de unos meses o quizá un par de años, comprobaremos cómo todos los vascos fueron antietarras, al igual que cuando murió Franco todos los españoles se declararon antifranquistas, y todos los chilenos antipinochet y a no muy tardar, cuando el Castro de las narices estire la pata y la barba, todos los cubanos serán y habrán sido anticastristas.

La historia siempre se escribe con los mismos renglones torcidos. Por eso suele repetirse y algunos espabilaos se la saben estupendamente. Pero antes de que llegue el momento de gritar que en más de 30 años no hubo proetarras en las tierras vascas y aledaños, bueno será tomarse con suma prudencia todos los aires que los pistoleros agonizantes intentarán proyectar con su putrefacto ventilador. Quizás tengan razón en bastantes de sus acusaciones, pero muchos no deberíamos ser tan rigurosos con los aludidos. A saber qué hubiéramos hecho nosotros en su lugar. A saber quién – de entre los supervivientes- tendrá las manos y la mirada limpias.

Lo que nadie podrá negar es que frente a los que pagaron (muchos), callaron (muchísimos) y colaboraron (bastantes), siempre quedará un grupo de escogidos (unos mil) que murieron por una causa absurda y cobarde, otro gran grupo (unos doscientos mil) que prefirieron no pagar ni morir y que se marcharon a otras tierras y patrias menos asilvestradas y, finalmente, otro selecto grupo de valientes que decidieron quedarse en su tierra para combatir desde ella a los pistoleros y sus secuaces con las únicas armas de la palabra, el voto, la no violencia y el coraje. A esta gente, cada una desde ideologías diferentes, ninguna declaración ante la policía de unos miserables y cobardes pistoleros podrá sorprenderles. Ellos sí que saben qué papel desempeñó cada cual en esta ya larga historia. Lo triste es que, al final, su valor no le será reconocido por todos esos -la inmensa y silenciosa mayoría- que dentro de cuatro días saldrán a la calle gritando que pelearon con todas sus fuerzas contra la banda etarra y que ahora están muy contentos y que si tal y que si cual.

Así funciona el circo de la historia y de la vida: siempre con el ventilador proyectando mierda. Y el que esté libre, que salga corriendo antes de que nos lo merendemos en nombre de las bellas mentiras con las que nos matamos y mordemos unos a otros.

miércoles, 13 de octubre de 2004

QUE USTEDES LO COMPREN BIEN

Dado que en las últimas paridas la cosa ha girado sobre la muerte, la enfermedad y otras gaitas poco agradables, forzoso es dar un giro al asunto y dedicar unos minutos a la frivolidad, aunque sea semi-inventada.

Todos los días cuando regreso a casa tras la agotadora jornada laboral (la que permite después darnos alguna que otra alegría), me encuentro el buzón repleto de propaganda de mis hipermercados favoritos. Un dineral para tirar a la basura, aunque los arbolitos que se cortaron para producir tanto papel inútil, esos –como las golondrinas de Bécquer- esos, ya no volverán.

Pero a lo que iba. Siempre pierdo diez minutos en mirar las ofertas y requeteofertas escondidas entre la tonelada de publicidad, antes de bajar a depositarla en el contenedor del papel reciclado. Y hoy venían unas cuantas cosas dignas de reseñar para poner los dientes largos a más de uno. Aquí van y que ustedes lo compren bien.

* En nuestro hipermercado siempre toca. Si no es un pito, es una pelota. Comprando mil euros en ropa vieja y usada de las mejores marcas, dos vales con premio seguro. Si no es un pito, es una pelota. Si no es una pelota, es un pito. Oiga, ¡y no es pitorreo! Regalos garantizados por el ilustre notario del Porrosillo, don Agapito Pelotas.

* ¡Oportunidad! Motosierra a precio de ganga. Corta árboles, cabezas y manos. Funciona a gasolina y a pedales.

* Tenemos enlatadas todas tus ilusiones lácteas: yogur con patatas, maxifrut de mantenquilla con biocebada, natillas para freir, batido con aloe pera, arroz con soja biodegradable y flanes la mar de bamboleantes. Y todo con la calidad de nuestra leche y los espermatozoides de las mejores marcas del mercado.

* ¡Ahorra la tira de euros! Piña piñonera por 500 euros, más propina a la cajera. Se regala un práctico y necesario cepillo recogemuelas.

* Alta tecnología del copón: ordenata Chinpún, con procesador Microsoft, sistema operativo Pentium, memoria Dolby, tarjeta de sonido Julio Iglesias y teclado de agua, al módico precio de mil euros y la voluntad. ¡Corre a comprarlo antes de que baje de precio!

* ¡Nunca tendrás un televisor como éste! Modelo catatónico, pantalla hipnotizante, sonido a grito pelado, con euroconector y dolarconector. Se convierte en un práctico cubo de basura cuando no lo utilizas.

* Por la compra de 200 latas de anchoas de la afamada marca “Gibraltar”, te regalamos un disfraz de pirata y una acción de la conocida Sociedad Cultural “Dos por tres, siete”.

* Tenemos una amplia gama de platos preparados que cubren todo el espectro ideológico y religioso de nuestros clientes: carne de burro con patatas, cerdo sin alcohol y sin cerdo, gallina a punto de huevo, cebollas a la remanguillé, paella pa él, pan cateto y vino de la cosecha del 2037, pasta a la india y nuestro plato estrella, hamburguesa de gambas con pepinillos al agua. Y como estamos en todo y nos desvivimos por nuestros clientes, con la compra de cada plato, regalo de una caja de pastillas antidiarréicas.

* ¡La mayor oferta de la galaxia la tenemos en nuestro establecimiento! Sofás camas por 200 euros (más regalo de una caja de cerezas); camas sofás por 300 euros (más regalo de un paquete de espárragos); cajas de cerezas por 200 euros (más regalo de un sofá cama) y ¡lo nunca visto!, un paquete de espárragos por 300 euros, con regalo de un práctico cama sofá.

lunes, 11 de octubre de 2004

REEVE ERA UN SUPERMAN



Hace unos dos años escribía en una bitácora anterior sobre Christopher Reeve bajo el título de “Ahora sí es Superman”. Releo aquel comentario, surgido a raíz de la presentación de un libro escrito por Reeve y titulado “Nada es imposible”.

“Una caída de un caballo allá por 1995 le dejó tetrapléjico, es decir, con pérdida total de movilidad y de sensibilidad del cuello para abajo. Hablo de Christopher Reeve, para muchos desconocido salvo que indiquemos a continuación que era el actor que encarnaba el papel de "Supermán" en el mundo del cine. Aquellas películas eran bobas e ingenuas. Desde aquel año fatídico, el bueno de Christopher está demostrando que Supermán no tenía nada de fantástico, que existe realmente en la vida cotidiana. Supermán es él mismo, sin ningún efecto especial ni guión ajeno. Es muy triste verlo en su actual situación pero su lucha, su coraje, su fortaleza moral tienen pocos competidores”.

Recuerdo por aquellas fechas que la prensa le citaba como un caso único en la historia de la medicina: “En una recuperación sin precedentes, puede mover su muñeca derecha, los dedos de la mano izquierda y los pies. Además puede sentir cuando se le pincha en la mayoría del cuerpo. (...) Reeve ha pasado desde el nivel máximo de parálisis, el A, al tercero, el C. Es el primer caso documentado de alguien que da un salto de dos letras en cinco años después del accidente. (...) La clave es el programa de duro ejercicio que Reeve sigue".

Aquel sacrificado ejercicio y aquella férrea voluntad han estado trabajando sin descanso durante todos estos años hasta que ayer el corazón de Reeve no pudo más. Quizás se llenó de hastío, de tristeza, de dolor ante tanto carcamal político y religioso como nos rodea. Ya entonces Chris culpaba a Bush y a la Iglesia del retraso en su cura: "Nunca pensé que la política influiría tanto en la Ciencia", afirma el bueno de Reeve, quien “centra la atención, y muy amargamente, sobre los políticos y líderes religiosos de EEUU y la forma en que, desde su punto de vista, han impedido la investigación sobre la clonación terapéutica y las células madre. De no haberse paralizado podría, a estas alturas, haberse obtenido drogas de diseño que regeneraran el sistema nervioso de mucha gente que está en la misma situación que él."

Ahora que se ha muerto todo son glorias y parabienes. Ya se sabe, los buitres siempre acuden al olor de los cadáveres. Modestamente, ya entonces escribía que “Chris está haciendo historia y, sobre todo, es un espejo donde poder mirarnos sin avergonzarnos completamente de la especie humana. Hay que echarle muchos bemoles a la vida para que encima tenga fuerzas para ser optimista y decir que "es de una importancia capital no dejarse vencer nunca por la negatividad. No sólo por salud mental sino, literalmente, por la salud física. Porque si se deja que la negatividad campe a sus anchas, la salud física se ve afectada también por graves problemas". Si esto lo dijera cualquiera, lo catalogaría inmediatamente de "cantamañanas". Lo dice don Christopher Reeve y no sólo me lo creo sino que se me pone un nudo en la garganta. De pena, de rabia y de amor por -ahora sí- el auténtico Superman. ¡Espero verle andar un día de estos, amigo!”

Se ve que Reeve era muy peligroso. Por eso los hados, los dioses o quienes demonios lancen los dados, han determinado que ya estaba bien de aguantar a un hombre tan valiente, tan activista, tan volcado en la defensa de sus congéneres y de sí mismo. Y se lo han cepillado. Parece que otro juez de pacotilla –véase post del día 9- ha decidido que había que ponerle punto y final a un tipo tan fuerte, tan vital y tan incordiante. Se puede ser Superman, pero sólo en la pantalla de un cine. En la vida real a los Supermanes se les manda a galeras, se les ningunea o sencillamente se les mata. Que siga la vida pero que nos dejen de tanto cuento sobre la justicia, los dioses y el tralalá.

viernes, 8 de octubre de 2004

Y EL JUEZ MANDÓ MORIR

Leo que “La justicia británica autoriza a los médicos a dejar morir a un bebé en contra del criterio de sus padres. Los médicos consideran que no sobrevivirá y el juez se ha mostrado partidario de que no se la someta a un tratamiento agresivo. Los padres, que confiaban en un milagro, no apelarán el fallo”.

La niña, nacida tres meses prematura, tiene 11 meses y está gravemente enferma. Los médicos la han desahuciado pues necesita un constante suministro de oxígeno y sufre problemas cardíacos, pulmonares y de otros órganos vitales. No puede respirar ni alimentarse normalmente. Aunque la niña ha dejado de respirar en varias ocasiones, siempre ha sido reanimada, hasta que los médicos han dicho que lo mejor es dejarla morir y que no sufra más. Como los padres no opinaban lo mismo, el tema pasó a la justicia pues la ley británica es ambigua en estos casos ya que da a la familia la última palabra pero permite también al médico no aplicar un tratamiento con el que no está de acuerdo.

El debate moral que plantea la decisión es muy importante pues aquí no nos encontramos con el caso más frecuente (como el de Ramón Sampedro, recogido por la película recién estrenada “Mar adentro” de Alejandro Amenábar) en que la persona, adulta, decide morir para no seguir sufriendo, sino que unos padres creen que su hija, menor de edad, debe seguir viviendo, mantenidos por una esperanza quizá ilusa pero comprensible desde un punto de vista humano. Cuando el interesado prefiere la muerte a la vida fósil y dolorosa, se puede comprender la elección, pero cuando quienes tienen la potestad de decidir desean que la dramática vida de su hija siga el tiempo que sea menester, el qué hacer no está nada claro ¿Es la obligación de los médicos seguir manteniendo con vida a la pequeña, aunque el deterioro de ésta sea cada vez mayor? (Un dilema que se plantea especialmente a consecuencia de los avances que se dan en la medicina moderna y sus contradicciones: la capacidad de prolongar la vida de un enfermo, incluso de un bebé prematuro, pero al mismo tiempo, la incapacidad de remediar la enfermedad que le tiene postrado). ¿Tiene preferencia en la cuestión la opinión de un juez a la de los propios padres?

Muchos han señalado que no ha sido la moral lo que ha presidido la deliberación del juez, si no el discernimiento entre qué era lo más conveniente para el bebé: vivir en el sufrimiento o acoger la muerte de manera natural y acabar así con el dolor de una vida atormentada. Yo no lo tengo nada claro. Porque el quid de la cuestión es que los padres querían que la niña siguiera con vida. ¿Y puede un extraño, por muy señor juez que sea, el tomar la decisión en contra de los padres de la criatura? ¿No es un riesgo dejar la última palabra en manos de un juez, un indocumentado como otro cualquiera, cuando hablamos de moral, de ética, de vida o muerte?
Parece ser que los padres no van a recurrir el fallo del juez, quien hasta ahora nunca había tenido que decidir sobre lo que muchos verán como la elección entre la vida y la muerte de un ser humano. Y esto es lo grave, lo peligroso o lo inmoral. Habrá quien tenga muy clara la cuestión. Para otros, entre los que me encuentro, hay decisiones en las que la justicia nunca debería intervenir. Porque los médicos podrán pecar de realistas y los padres de utópicos, pero el rol del juez no lo veo por ninguna parte, salvo el de meterse en camisa de once varas. Podía simplemente haberse inhibido. Desconfío enormemente de los que nunca tienen duda de nada y de quienes, amparados en sus inanes conocimientos, se creen los reyes de la creación. Cuando las cosas no están claras mejor que el tiempo y el azar sigan su curso y aclaren el panorama. Ya tenemos bastante con los dioses a los que adoran tantos iluminados en mezquitas e iglesias como para que encima añadamos dioses de carne y hueso, vestidos con togas o batas blancas. Eso sí, siempre actuando por el bien de los demás. Aunque sea enviándolos al otro barrio. ¡Encantadora tanta caridad!

miércoles, 6 de octubre de 2004

MORIR CON LA POLTRONA PUESTA

Ayer, cuando intervenía en el debate sobre el estado de la autonomía en el Parlamento gallego, Manuel Fraga, presidente de la Xunta de Galicia, sufría una lipotimia. El buen señor llevaba una semana de arduo trabajo resolviendo problemas internos de su partido, viajando de aquí para allá y con la guinda de una gastroenteritis para rematar la faena. Ya es la segunda vez que le pasa algo parecido en poco tiempo y se vuelve a cuestionar que con la edad que tiene sea la persona apropiada para gobernar una comunidad tan importante como la gallega. Cualquier día de estos se quedará más tieso que la mojama, sea firmando un decreto, inaugurando una pizzería o delante de las cámaras de la telecaca. ¿Qué lleva a un hombre a estar amarrado al poder hasta que la trombosis, el infarto, la angina de pecho o un aire se lo lleven directamente de la poltrona de mando a un rinconcito desconocido del más allá?

Tengo dicho por algún sitio que la droga más dañina y más poderosa es el ejercicio del poder. Y cuanto más notorio e influyente sea el escalón de mando desde donde se ejerza, más dura y adictiva será la drogadicción. Cualquier droga, a largo plazo, tiene unos efectos de degradación y empobrecimiento en quien la toma. Pero la droga del poder actúa a la inversa: enriquece a quien lo detenta y hace polvo a quienes sufren el efecto de dicho poder. Ningún ejercicio del poder es positivo. Esto no lo dicen sólo los ingenuos anarquistas: lo sabe hasta el más tonto de cada pueblo. Otra cosa es que, como especie poco inteligente, los humanoides seamos incapaces de vivir sin él. Pero que nos sea inevitable no quita para que sea enormemente dañino….para quienes lo padecen. Para el que lo detenta es una bendición y a ella se agarra hasta que otro más listo le pega la patada o los sufridos pacientes lo largan con viento fresco eligiendo a otro.

En las democracias consolidadas y medianamente “libres” los ciudadanos tienen la potestad de quitar y poner a los mandamases. Por eso muchos de ellos se tienen que ir con el rabo entre las piernas, aunque al cabo de una temporada más de uno regresa de nuevo (la droga engancha que no veas), una vez olvidadas sus tropelías anteriores. En las dictaduras, donde ni hay ciudadanos ni hay tío páseme el río, el menda que gobierna se eterniza hasta que le da un patatús y lo entierran. Recuérdese la camada de vejestorios que gobernaron la URSS en el siglo XX o las edades provectas de algunos dictadores latinoamericanos, pasando por el Franco español o el Castro cubanito.

Manuel Fraga, político que ha sabido adaptarse a las dos tostadas, a la dictadura de Franco y luego a esta teledemocracia, todavía sigue en el machito pese a sus 82 años. Y, francamente, da pena verlo. La edad no perdona para según qué cosas. Igual le pasa al Papa, por cierto. Genios y figura…hasta la sepultura. Drogadictos del poder, aunque seguramente ellos estén convencidos de que lo suyo es exceso de responsabilidad, de vocación, de amor al prójimo y otras coñas marineras. Claro que peor les va a otros, 20 ó 30 años más jóvenes, que ya están reclamando a gritos la jubilación anticipada por ineficaces, cagamandurrias y tontos del culo. Bush, un suponer.

En este sentido, todavía está pendiente el homenaje a Aznar por haber decidido irse voluntariamente del ejercicio del poder, cuando ocupaba el puesto más alto y deseado. En otras cosas fue un desastre, pero sería de necios negarle el aplauso en esa decisión. Pues ni eso son capaces de hacer sus adversarios políticos, los muy desagradecidos. Y es que están muy ocupados chutándose en vena el poder recientemente alcanzado. (“El Gobierno destituye a 21 directores de prisión y traslada a otros diez”. Ya se sabe, quiere gente de toda confianza que se pliegue fielmente a sus deseos. El drogata del poder sólo se fía de los eunucos, bufones y lacayos que él nombra directamente).

lunes, 4 de octubre de 2004

EL ARTE DE LOS MAMARRACHOS

Hay follón en Sevilla. Desde hace unos días se exhibe en dicha ciudad la Bienal de Arte Contemporáneo en la que el escultor Mauricio Cautelan ha colgado en el exterior del recinto un niño ahorcado, una obra “maestra” de la cultura vanguardista de esta época tan majadera que nos ha tocado vivir y que ha originado lo que se buscaba: la polémica.

Dice la jefa de la Bienal que la escultura no la va a quitar porque no ha recibido ninguna comunicación por parte del gobierno andaluz. (O sea, que ella sólo recibe órdenes del gran jefe Chaves). Es mas, la directora de la muestra se muestra pizpireta y lenguaraz defendiendo la obra de Cautelan pues “ha conseguido el efecto que pretendía, que era despertar la polémica”. Dicho de otra manera, como somos así de borricos, ahora son ya miles de personas las que se agolpan a las puertas de la Bienal para curiosear en torno al “niño ahorcado” y poder decir así que ellos estuvieron allí y que la cosa les parece así o asá.

Continua diciendo la ínclita señora que la polémica escultura denuncia “"una realidad horrorosa que no se quiere ver", y que son los miles de niños que mueren a diario en el mundo por falta de alimentos y por otro tipo de necesidades. El artista se pregunta en esa obra "cómo puede ser la sociedad tan hipócrita que se sorprende por un muñeco colgado de un palo" cuando "nos encontramos a diario imágenes fantasmagóricas" de niños que mueren o que son víctimas de guerras o de otras situaciones. Y la moza acaba argumentando que el papel del artista es "despertar a la sociedad ante temas de actualidad", y no sólo el de "mostrar cosas bellas".

Uno pensaba que la primera obligación del artista es crear arte, pero se ve que eso queda para Velázquez o Goya. La escultura del niño ahorcado no tiene ni un gramo de arte pues se trata de una vulgar estupidez: un muñeco colgado de un palo. Idear semejante patochada se le puede ocurrir al más tonto de los tontos. Exponerla al público, ya es más difícil, pues para ello hace falta tener padrinos de tan mal gusto como el propio autor y la jefa de la Bienal.

Pensar que semejante mamarrachada “artística” es provocativa, remueve conciencias o denuncia injusticias, sólo puede salir de una mente calenturienta que conoce las injusticias a través del Telediario y que cree que por exponerla en una bienal artística va a resolverlas. Nunca erraron tantos necios juntos. Estoy hasta el copetín de tanta solidaridad de boquilla, de tanto progresismo de bisutería, de tanto “compromiso” social desde hoteles de cinco estrellas. Aquí de lo único que se trata es de llamar la atención, de salir en los periódicos y de vender. Y lo demás son cuentos. Y como no se tiene calidad artística suficiente ni la más mínima vergüenza, se montan estos numeritos para ganarse unos minutos de fama y unos cuantos miles de euros. Encima se pretende vender el rollo de que la sociedad es hipócrita, pacata y acomodaticia. Y ellos, claro, unos angelitos maravillosos, comprometidos y honestos gracias a cuyo esfuerzo y trabajo “artístico” se removerán las conciencias adormecidas y reaccionarias del resto de los mortales. El que piense que con un cuadro o una escultura (por muy bella que sea, que no es este el caso) va a mejorar y transformar el mundo, no tiene ni puta idea de donde vive. Se la dará de muy progre, de socialmente avanzado y de hacedor de la humanidad, pero en lo mínimo no dejará de ser un vulgar cantamañanas y en lo máximo, como es el caso que nos ocupa, un “listo” dispuesto a forrarse montando un “numerito” que sólo provoca asco y pena.

Ya puestos a colaborar con semejantes buitres, sugiero varias ideas a la directora de la Bienal, estas mucho más provocativas y artísticas que las de la escultura del niño ahorcado. Sugiero que quiten al niño y pongan una escultura representando al presidente de la Junta de Andalucía, el señor Chaves, al presidente del Sevilla Club de Fútbol o al propio autor, el “despertador de conciencias” Cautelan. Así tampoco arreglaríamos el mundo, pero no veas lo que nos íbamos a reir. ¿A que no se atreven?

viernes, 1 de octubre de 2004

EL IMPERIO BUSCA A SU CÉSAR

Anda el Imperio en juerga electoral buscando su César para los próximos años. Allá por los 50 antes de Cristo, otro Imperio famoso, el Romano, estuvo gobernado por Cayo Julio César, un tipo que fue acumulando poder como el que colecciona mariposas. Un poder de origen y carácter militar, conquistado y defendido por la fuerza, apoyado por la fidelidad del ejército más poderoso del mundo, lo que hasta entonces no se había visto nunca. Aquel triunfador añadió a sus numerosos títulos y tropelías el de Imperator. Y desde entonces, casi siempre hemos tenido uno encima de nuestras cabezas.

Pues ahora andan los USA buscando su Imperator. El nuevo Emperador saldrá de la pugna periodístico-propagandística entre el anterior, un tal Bush –un patán con menos cerebro que un batallón de mosquitos- y un tal Kerry, un tipo que fue soldado e hizo mucho deporte. O sea, que la cosa se dilucidará entre Guatemala y Guatepeor. Se sabe que al Bush le gusta un tanque y una guerra preventiva más que un caramelo a un goloso, pero viendo el historial militar de Kerry más de uno debería estar pensando en emigrar a otro planeta, si el gachón triunfa.

El candidato demócrata (es un decir, claro) es muy hombre y mejor soldado. Sus hazañas de guerra se han mezclado con las de windsurf, béisbol, fútbol americano y ecétera. El amigo ha pilotado aviones, helicópteros y hasta una Harley Davidson, chupa de cuero incluida. Muy moderno el tío. Y muy macho. Tanto que el otro día –en Ohio- cogió el rifle y mató dos faisanes de un solo tiro. A la vista de todo el mundo. Sin cortarse un pelo ni ponerse colorado. Un genio, el muchacho.

Respecto a Bush, como ya lo conocemos, qué vamos a decir. Habría que mandarlo de nuevo a la escuela (mejor a un correccional). Se le ha visto de cowboy, con el hacha en ristre o la sierra mecánica, cortando árboles pues el capullo tiene alergia a la vegetación. Sus uniformes de camuflaje, sus escenas en los portaviones y restante parafernalia militar, también son famosas en este caballero tan cultivado en la violencia, tan escaso en la sapiencia y tan amplio en la ridiculez. Encima folla poco, y mal, según cuentan las malas lenguas. Todo se junta para que pague el pato el resto de la vecindad. O sea, el planeta entero, incluidos los EEUU.

¿Cómo votar a cualquiera de estos dos botarates? ¿Cómo depositar la confianza en unos mendas lerendas cuya mayor preocupación en la campaña electoral es ver cual es más hombre empuñando un rifle?

Gane quien gane, los USA y el mundo saldrán perdiendo. Salvo que un milagro divino produzca un empate electoral y hayan de repetirse nuevamente las elecciones. Entonces quizás dé tiempo a que a los dos les dé un ataque de locura (más de la que tienen) y los médicos los manden para casa a comer sopitas y matar las hormigas del jardín, hasta el fin de sus días. Pero no caerá esa breva.
El Imperio y el Planeta están a punto de conocer su nuevo César. ¡Que Alá nos pille confesados y con el culo prieto!